42: La última noche.

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Lilian

— Y te ganaste un castigo — sus ojos oscuros cargados de deseo me escanean y siento que me está tocando de tanta intensidad que hay en su mirada.

Camino a la mesita para dejar el consolador. No deja de mirarme ni un segundo, me acerco y extiende su mano, para que le quite el amarre de la corbata, la desato y me mira todo el tiempo a mí, como hace para tenerme así totalmente mojada solo con su mirada, suelto la otra y no se esperó ni un segundo para tomarme en sus brazos y tirarme sobre la cama.

— Lil, te juro que hoy no salís de está cama, te van a escuchar en todo Ibiza de tanto placer que te voy a dar — me besa con una intensidad que nunca sentí, sus manos me acarician con ganas, es como si sus dedos quedaran marcados por cada lugar que toca.

Me muerde y pasa su lengua por mi cuello hasta llegar a mis pechos los cuales tortura con ganas, me tiene retorciéndome y gimiendo como loca, su mano viaja a mi centro.

— Mojada y para mí— vuelve a besarme — Mia Lilian, toda mía y no pienso compartirte ni siquiera con un aparato — introduce un dedo mientras con si pulgar me estimula arrancándome gemidos.

— Ahhhh Ahhhhhh — no se detiene besa mi cuerpo bajando hasta mi centro.

— Totalmente mía, que quede claro — saca su mano para enterrar su cara en mi vagina, lame, succiona y da pequeños mordiscos delicados que me tienen en un mar de placer como nunca antes.

Hace círculos con su lengua y estallo, no me da tiempo a nada porque me gira poniéndome boca abajo agarra mis manos para ponerlas en mi espalda, con una de sus manos las sostiene y con la otra me da una nalgada mientras me penetra en una estocada.

— Aahhhhhh — otra nalgada — Siii — otra más, dios mío, siento que cada que me da una me mojo de una manera tan increíble mientras bombea en mi interior llenándome de espasmos deliciosos.

— ¿Te gustan? — una embestida junto con una nalgada acompaña su pregunta.

— Ahhh si — otra más— Me encanta Dan, me encanta — Más— Sos el mejor por dios — más y más.

Suelta mis manos y me preciosa contra la cama haciendo que muerda la almohada mientras mantiene mi cadera tan pegada a él que entra y sale completamente de mí dejándome casi sin conciencia. No puedo hablar, solo gemir, cada orgasmo llega volviéndome agua.

Vuelve a girarme dejándome debajo de él y me besa, toma mi mano entrelazándola con la suya mientras que con la otra mano se acomoda entrando dentro de mí otra vez, es más suave y constante, enredo mis piernas a su cadera.

— Lil mírame preciosa — abro mis ojos y conecto con los suyos un momento — Quiero todo Lil y haría todo por tenerte — me besa y abrazo su cuello perdida en sus palabras mientras en esa cama siento que por primera vez, hice el amor, hice el amor con Danniel.

¡Yo lo amo!

******

Danniel

Estiro mis manos dormido y la suavidad de su piel me espera, acaricio sus piernas, subo hasta su espalda, paso por sus brazos. Qué lindo es tenerla así desnuda en la cama pegada a mi cuerpo. Mueve su trasero que está pegado a mi entrepierna, entierro mi cara en su cuellos aspirando su aroma y ella se gira sonriendo.

— Buenas noches — murmura con una sonrisa mientras pasa sus brazos por mi cuello — Dormí demasiado bien — sube su pierna a mi cadera y me besa suave, lento. — Sé que está mal que quiera más de tu cuerpo, pero no puedo si estás así para mí — se pega a mi dura erección.

Solo me sonrío ante su libido tan alto, fue increíble, lo que pasó en está cama fue lo más increíble de mi vida, parece algo tan tonto, estuve con ella muchísimas veces antes, pero esta vez fue diferente, siento que deje algo de mí, no fue solo follar y ya, hacer el amor es algo tan simbólico pero que sentimentalmente tiene mucho significado, no puedo creer que nunca lo había hecho, pero se sintió tan especial, me sentí correspondido y quiero hacerlo así por siempre.

¡Podría ser tu padre! 🔥(HISTORIA FINALIZADA) 🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora