Extra Jinna y Nam

Start from the beginning
                                    

Arqueo mi cadera en su dirección cuando él deja de presionar y gimoteo. Me siento extraña por hacerlo, pero no me siento juzgada.

—Por favor... Por favor, ¿Puedo correrme?


—¿Eso quieres?


Asiento, entrando en un bucle de placer que me permite olvidar mis inhibiciones, al menos por un rato.

—Tócame, por favor, tócame.


—¿Me estás dando una orden, nena? —
niego, abrumada por la sensación cálida
de su mano ahondando entre mis piernas .


—. ¿O me lo estás suplicando?

— Por favor...

No puedo darle órdenes. No das órdenes entre gimoteos y por favores. Así que, reduciéndonos a las opciones, le estoy suplicando descaradamente que me toque.

Me lleva al límite. Lo hace, en serio.

Su pulgar se mueve por encima del botón sensible y sus dedos se adentran en mi interior. Estoy tan mojada.

—Noo... - deja de moverse cuando me retuerzo contra él, a punto de liberarme —. ¿Ibas a correrte sin permiso, muñeca? — vuelve a mover sus dedos en mi interior y se me hace muy difícil contener los sonidos que salen de mi boca—. No vas a hacerlo todavía su cuerpo abandona la cama y me siento extrañamente vacía hasta que él regresa. La venda se mantiene sobre mis ojos,
así que no sé qué demonios fue a hacer, pero cuando regresa, me queda claro.

Poco después, su cuerpo está cubriendo el mío. Una de sus manos sostiene mi rostro y de no ser por la venda, me estaría esforzando por mirar sus penetrantes ojos verdes. Me besa, su lengua invade mi boca y juega con la mía. Ambas se enredan, se tocan y cuando creo que podría quedarme sin aire, él se separa, para llenar el resto de mi rostro de besos húmedos.

Quisiera hacer algo, al menos tocarlo, pero no debo hacerlo.

Sus manos abandonan mi rostro y levanta los brazos hasta sostenerlos contra la almohada, por encima de mi cabeza.

Entonces, me folla. Es algo crudo, hasta parece descuidado, pero aún así, no hay
nada agresivo, doloroso o peligroso en
esto. Es fuerte , me abruma y saca hasta el último gramo de cordura de mi cuerpo.

No sé cuánto tiempo está moviéndose en
mi interior , deteniéndose y cambiando
el ritmo, alterando mi respiración y mi
ritmo cardíaco. Su pene entra y sale de mi interior y el chasquido de su piel chocando
contra la mía es lo único que suena
en la habitación , además de un pitido
que resuena en el interior de mi
cabeza cuando una de las manos de Nam rodea mi cuello, cortándome la respiración y obligando a mi sangre a acumularse en mi cabeza.

El mareo, los jadeos, los toques suaves y la penetración constante de su cuerpo en el mío, me vuelven loca.

Cuando creo que no aguantaré más, me corro con su permiso y Nam también, poco después. Él sigue moviéndose, bajando gradualmente el ritmo.

—Nam...

—Estoy orgulloso de ti, nena - murmura, pegando su boca a la mía y besándome por varios segundos.

Respondo torpemente, mientras mi
cabeza es un desastre de pensamientos
que no logro comprender del todo.

¿Por qué él se siente orgulloso? ¿Por
qué su aprobación comienza a ser tan importante para mí?

El hombre sigue tocándome lentamente
y no soy consciente de nada más que
sus manos y su tacto en mi piel. Solo...
lo único que recuerdo en este momento, entre toda la bruma, son las palabras que soltó antes de empezar. Dijo que olvidara todos los problemas, que toda la mierda
se quedara fuera y, siendo honesta, en
este momento ni siquiera estoy segura de recordar mi nombre.

No sé cuánto tiempo pasa hasta que mi respiración se tranquilice, mientras sigue tocándome lentamente, devolviéndome a la realidad. Me cuesta, debo decir, porque estoy cómoda en esta nebulosa, ajena a cualquier cosa que no sea disfrutar de su cuerpo y el calor que me proporciona.

𝑆𝑢 𝑎𝑟𝑜𝑚𝑎 ✅ Próximamente en físico dyjawards24Where stories live. Discover now