En el rincón, el encuentro fatídico,
la araña teje su verso onírico.
Mas el humano, ciego y despiadado,
con su mano fría, el poema ha aniquilado.
Araña
En el rincón, el encuentro fatídico,
la araña teje su verso onírico.
Mas el humano, ciego y despiadado,
con su mano fría, el poema ha aniquilado.