Capítulo 110: ¡¿Dónde está él?!

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Frente al televisor, Yang Dahai miraba la pantalla ansiosamente.

El teléfono sonó y él contestó.

—Lao Yang... todavía no hay noticias... —Era una llamada del jefe del distrito militar; su voz era baja.

—No te preocupes. Ya hemos enviado helicópteros y definitivamente los encontraremos... Yang Lei se ofreció voluntario para asumir esta tarea y se apresuró al frente. Es un excelente soldado...

Yang Dahai bajó lentamente el teléfono. Su cabello estaba gris y su rostro parecía haber envejecido varios años de la noche a la mañana.

El sonido de la televisión seguía llegando. Yang Dahai bajó su cabeza gris...

En el condado de Meng, se llevaba a cabo una intensa búsqueda y rescate. Había helicópteros con ruidosas hélices, militares y policías trabajando arduamente para reforzar urgentemente los diques, comandos roncos, llamados de socorro, el clamor de la gente, el barro salpicando en todas direcciones, la crecida del río...

—¿Cómo va? —El comisario Lu levantó ansiosamente su walkie-talkie.

—No hemos encontrado el objetivo aún, seguimos sin encontrar el objetivo... —repitió la voz en el helicóptero.

—¡Informe! —Un soldado llegó corriendo a través del agua lodosa—. Una persona intentó entrar en la montaña para buscar a alguien, pero lo detuvieron fuera del valle. ¡Es un civil!

—¡Tonterías! ¡Deténganlo! ¡Aparte del equipo de refuerzo, nadie puede quedarse aquí!

—Es amigo del Oficial de Estado Mayor Yang. Él...

—Díganle al público que estén tranquilos, ¡definitivamente los encontraremos! —El comisario Lu estaba nervioso.

Un grupo de personas se apresuró con pasos alternadamente superficiales y profundos, protegiendo a alguien. El comisario Lu desafió el viento y la lluvia para encontrarse con ellos.

—¿Hay noticias? —El rostro de Yang Dahai mostraba ansiedad y agotamiento.

—... —El comisario Lu negó con la cabeza en señal de pesar. Yang Dahai estaba abatido...

La lluvia caía con más intensidad y la corriente era fuerte. La tierra de la montaña estaba empapada y el suelo había sido arrastrado.

—Es demasiado peligroso aquí. Por favor, retírese a un lugar seguro fuera del valle. —El comisario Lu pidió a alguien que acompañara a Yang Dahai.

—¡Estoy bien!

Yang Dahai perdió su elegancia y calma anteriores. Era un oficial, pero también era un padre.

Las personas alrededor guardaron silencio...

—¡Espera! ¡No puedes entrar aquí! ¡Camarada!

Alguien apartó la barricada y corrió hacia adentro. Yang Dahai lo vio y se sorprendió.

—¿Dónde está Yang Lei?

Esa persona se precipitó ante Yang Dahai.

—... —Yang Dahai guardó silencio.

—¡¿Dónde está él?! —rugió Fang Yu.

Hubo conmoción en un rincón distante. La multitud estalló en un alboroto y muchas personas corrieron hacia la montaña.

—¡Hay gente en la montaña!

—¡Rápido! ¡Equipo de rescate!

—Informe. Encontramos al objetivo, encontramos al objetivo...

Luchador de clase oroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora