Evil Monster† Johan Liebert

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-¡¡NO!!—Desperté gritando.

Joder.

Fue un sueño, una puta pesadilla.
Me acomodé en la cama quedando sentada, frotando mis manos a mi cara con frustración.

Se había sentido real.

¿Quien era él?

Se me hacía conocido, pero lo extraño era que su cara estaba borrosa. Aparte fue aterrador, las personas tendidas en el suelo y la sangre. Me dan escalofríos.

Suspiré.

Voy a dejar de pensar.

Me levanté de la cama, dirigiéndome al baño para darme una ducha.
Ya cambiada, fui a la cocina para hacerme el desayuno. Miré la hora en el reloj que tenia colgado a la pared.
08:45 a.m.

Era demasiado temprano siento como si no hubiera dormido nada. Aparte tengo que repasar lo que voy a estudiar en la prueba y procedí casi todo el dia.

Carajo.

Froté mi rostro con algo se irritación.
Estuve casi todo el dia estudiando. Quiero dormir. Vi de nuevo la hora

18:30 p.m.

Me daré un descanso.

.

Los dias pasaron rápidos, como si nada.

Era lunes.

Odio los lunes,ya que es el primer  dia de la semana tambien el dia que siempre me encabrona.

— En la tarde tengo que hacer un examen — Me queje.

Camine por los pasillos de la facultad  casi no se veia nadie, ya que había llegado temprano como siempre.
Fui a la cafetería porque tenía hambre hasta que paré de repente.

Ugh.

Johan estaba ahí.

Sentado leyendo un libro.

No quiero hablar con él  asi que me di la vuelta ignorándolo.

—Reader—Me habló.

Dejando de lado  su  libro me miró dándome una suave sonrisa.

Volteó para mirarlo, dirigiéndome a él dando  una sonrisa forzada. No me queda de otra que saludarlo.

— Oh.. hola Johan— Hablo un poco dudosa.

Lo voy a saludar y me largo.

—¿Como has estado?— Dijo mirándome fijamente.

— ¿Bien y tu?— Le respondo.

"Tendré que dejar de ignorarlo"

Me acorde de las palabras de me dije a mi misma la  otra vez.
Espero que no recuerde el dia en que me hablo en el parque, porque no se como darle una respuesta. Solo espero borrar cualquier rastro de incomodidad.

—Más que bien— Hablo de manera pausada y suave como si cada palabra tuviera otro significado. Me sonrió.

Suspiré.

Siempre lo veo sospechoso, no se que me pasa. Debo borrar esos pensamientos.

Por lo menos di el primer paso, hablarle

Hasta que.

— ¿Me puedes dar un poco de  compañia? Todavia queda una hora para que comienze la jornada — Dijo para palmear un asiento que estaba al lado suyo.— Me siento un poco solo, si no te molesta—
Hablo de manera inofensiva, esperando una respuesta. Yo lo miré sorprendida y algo dudosa. Su mirada es profunda e insistente, siento presión en su mirada.  Como si no tuviera mas opciones que sentarme con el.

Joder.

— No es molestia para mi, no te preocupes— Me sente en la silla.