Spikes//Jiyoo

8: Sweet kisses

Siyeon, Bora y Jennie ya estaban de regreso en la academia, habían llegado de a una ya que ninguna encontró en camino al lago en medio del bosque, las 3 estaban preocupadas ya que ni Minji ni Yoohyeon aparecían, las 3 estaban hablando cuando unos jadeos por parte de algunos profesores se hicieron presentes, Haciendo que voltearan y vieran a Yoohyeon, sus ojos reflejaban vacío y dolor, su rostro estaba en blanco y su mirada fija en lo que traía en brazos...el cuerpo sin vida de su líder. Detrás de ella Venían Pie y Cherry en sus formas normales, esta última había respetado la decisión de Minji y se había enlazado con Yoohyeon para poder protegerla, la primera en correr hasta ella fue Roseanne devastada al ver a su hermana en ese estado, la siguieron Siyeon en Shock, Bora al borde de las lágrimas y Jennie pues ya estaba llorando. Roseanne tomó el rostro de su hermanita entre sus manos y dejó salir un llanto desgarrador, escondiendo la cabeza en el pecho de la menor que seguía descansando en brazos de la peliazul que se rehusaba a soltarla, no quería que la separaran de su lado. Por desgracia unos profesores le arrebataron a su amada de las manos y Siyeon la sostuvo para que no se abalanzara contra ellos, escuchando sus gritos y suplicas incesantes, gritaba para que no se la llevaran, que no la apartaran de su lado mientras amargas lágrimas salían de su rostro, sentía como si le hubieran quitado una parte de si misma.

RS: ¿¡Por qué no la protegiste!? ¡Maldita seas!

SY: ¡Roseanne, no fue culpa de Yoohyeon!

YH: S-sí lo fue...no llegué a tiempo...e-ella...

Siyeon la abrazó a su cuerpo y Roseanne fue a donde llevaron a su hermana, la profesora Chunga la estaba revisando mientras las otras 3 trataban de consolar a Yoohyeon, aunque todas estaban dolidas.

YH: F-fue mi culpa...e-estaba enferma...e-ella pensaba que...

SY: Respira profundo Yoohyeon, solo respira.

La peliazul hizo lo que le decía la mayor, respiraba continuamente para así conseguir calmar su voz, pero no su tristeza, era quien peor había reaccionado pues la había visto morir en sus brazos, no le deseaba ese dolor a nadie.

YH: Ella me amaba...y pensó que yo no sentía lo mismo por ella...desarrollo esa extraña enfermedad que hace que escupa pétalos de flores...no recuerdo como se llama.

BR: Hanahaki...eso explica el pétalo que encontramos en el baño el sábado.

SY: Esa estúpida...¿Por qué no dijo nada?

YH: N-no lo sé Unnie...no lo sé...

Todas a este punto eran cascadas de lágrimas, hasta que el grito de Roseanne hizo que todas se sobresaltaran y miraran en su dirección.

RS: ¡Minji, Minji!

La pelimorada tosia expulsando los últimos pétalos que tapaban sus pulmones mientras la profesora Chunga aplicaba magia sanadora en sus heridas, la chica había vuelto, pero en un estado de coma tras el tiempo que había estado muerta, la primera en correr hacia ella fue Yoohyeon, rodeándola otra vez con sus brazos mientras un llanto de angustia salía de ella, estaba viva, estaba viva maldición.
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Un mes había transcurrido, Minji aún estaba en cama sin despertar, las chicas de vez en cuando se turnaban para hablarle, pero quien más tiempo pasaba con la pelimorada era Yoohyeon, habían noches que pasaba en vela observándola atentamente y acariciando su rostro con alguna esperanza de que ese tacto la despertara, pero nada sucedía. Hoy estaba en clases, más aburrida que de costumbre, era su clase favorita antes porque siempre competía con Minji, pero ahora se sentía tan vacía, el asiento a su lado sin su ocupante hacía que se sintiera peor. Al finalizar el día volvió a su dormitorio junto a las demás, platicaron que tal había sido su jornada y después cada quien fue a su lugar de descanso, Yoohyeon en cambio subió a la cama de Minji, donde esta misma descansaba boca arriba con algunos sacos de suero y vitaminas conectados a sus brazos. Por solicitud de Yoohyeon la habían dejado en el dormitorio, así podía estar a su lado sin temer a que la echaran de la enfermería.