#14 ❝ ERES UNA MENTIROSA ❞

73 10 5
                                    

Los recuerdos del festival eran borrosos y el sol de la habitación blanca hacia que las sábanas adquieran un calor poco a poco.
Mi cuerpo se meció hasta un extremo por el "ruido" que había y no procesaba.

— Maldita sea... ‐susurré y tallé mis ojos.

Me levanté de la gran cama y fui hacía el baño para la lavar mi cara pero extrañamente mis productos que ocupaba habitualmente en mi rutina no estaban sino que, en cambio, todos habían sido reemplazados por productos masculinos. Salí del baño hasta el espacio dónde estaba mi teléfono para poder orientarme, miré hacia todos lados al escuchar cesar el ritmo y en cambio lo remplazó un par de pisadas que iban subiendo la escalera con tal determinación que no sabía dónde meterme.

Tomé una camiseta amplia que había allí y al momento de salir y cerrar la puerta me giro encontrándome con el rostro sorprendido de Ethan a muy poca distancia del mío. Su altura era obvia y mordí mis labios para subir la cabeza y mirarlo directamente a los ojos.

— Buenos días, bella durmiente -sonrió mientras acariciaba los bordes de mi cintura y acomodaba la camiseta ancha.

— Buenos días -correspondí- Oh, esto... -intenté decir mientras me apuntaba a mi misma por las prendas.

— No pasó nada -admitió- eso no me hace ser caballeroso, mucho menos si todo lo que haya pasado después no recuerdes.

Mordí mis labios para retener ese sentimiento tan eufórico dentro de mí. Mas, me acercé a su cuerpo un poco sudoroso y cambié el tema.

— ¿Tienes calor? -pregunté.

— Sí, por eso me quise distraer un ratito contigo.

— Así que crees que te distraigo... -actuo ofendida y nos echamos a reír.

— Lo desideri, carina -murmuró- pero la verdad es que me siento demasiado estresado -hizo un puchero.

— ¿Por qué lo dices?

Bastó muy poco para darle paso a su habitación y que se sentara encima de las sábanas ya frías por el rato que había salido de allí.

— No lo sé, estas vacaciones han sido tan diferentes a las anteriores -susurró- ahora todo ocurre tan rápido y ni yo logro procesar que en dos semanas vuelva a tener una vida a base jetlag.

— Pero eso es lo que haces Eth -acaricié su largo cabello y me acercé a sus hombros- eres un artista, un verdadero rockstar. Sé que es normal frustrarse porque no todo salga como quieres pero haz que eso no te haga una persona que quiera abandonar todo tan fácilmente.

— ¿Y si te digo que es por tí? -me miró a los ojos.

— ¿Por mí?

— Sí, ya sabes que -pausó- no sé que pasa entre nosotros, no quiero arriesgarte ni hacerte sentir sola acá.

— Es inevitable -sonreí suavemente- no creas que te olvidaré. De la misma manera también estaré ocupada en Roma y de vez en cuando agradeceré estar distraída para no pensar demasiado en la diferencia horaria.

— Es que tú no entiendes -suspiró frustrado y eso hizo que me alejara de él- no quiero ser como tu ex.

Mis ojos se abrieron de par en par y acaricié mi cabello rápidamente con temor. Nunca Ethan había mencionado algo de su personalidad, yo era una de las únicas que le había contado lo poco y nada por esa llamada absurda.
No es algo demasiado importante ahora mismo, creo que cada uno sana a su manera pero si tuviera que elegir entre todo lo demás, definitivamente ojalá no verlo más.
Olvidaba que mi corazón dolía cada que lo nombraban más si es una persona tan importante como el chico que me hablaba de mi pasado. Entre todas las traiciones, distancias, obsesiones y ex-amistades, el verdadero hombre que ahora estaba tomando mis manos era el baterista italiano de cabello largo.

AMARTI | Ethan TorchioWhere stories live. Discover now