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INNOCENCE. ( LIBRO UNO. )
Harry sin expresión facial, abrió la puerta de la habitación con dificultad ya que traía a Jade en sus brazos cargándola de forma nupcial, mientras que esta lloraba en silencio aferrada a la camisa de su novio. El rizado examinó la habitación, había pedido habitación con una cama grande para ella y él, ya que ahora que eran novios, sería normal.
La recostó sobre la cama, ella aún traía su camiseta lo que la hacia ver más pequeña. Se acerca a su mejilla y la besa con dulzura. — Calma, bebé — le susurra mientras sus manos van bajando hacia las piernas de ella, las acaricia lentamente esta vez besando sus labios; su manos viajaron al botón del pantalón de ella desabrochándolo mientras seguía el beso, rápidamente se lo quito dejándola solo con su camisa y ropa íntima. No lo harían horas después de lo ocurrido, solo que no quería que ella durmiera incomoda por los jeans que traía.
Harry iba a alejarse para poder quitarse su pantalón pero las manos de su novia lo detuvieron, sus ojos se conectaron. — Hazz, ven conmigo — suplicó con sus ojos rojos. Él sonríe débil y se acerca a ella, une sus frentes.
— No te dejaré sola nunca, Poopey — la besa cortamente dibujando una sonrisa en los labios de Jade, la cual no había sonreído desde hace horas, y eso le dolía a Harry. Vuelve a besarla — Nunca lo haré.
Ella une sus labios por tercera vez, queriendo que por fin se recostara junto a ella y la abrazara hasta que cayera en un profundo sueño junto a él. Harry sonrió entre el beso y se desabrochó rápido el pantalón quedando solamente en bóxers, él siempre dormía así, Jade lo sabía. Se puso sobre ella sin aplastarla, la castaña en estos momentos, a simple vista no estaba siendo inocente, pero ella sabía que Harry no quería nada con ella ahora, pero estaba lista de lo que diría.
Se separaron por falta de aire, Jade lo miró pero él seguía con sus ojos cerrados. — Estoy lista — susurra la pequeña castaña sonrojándose de inmediato. Harry abre lentamente sus ojos y la ve sin expresión al no entre lo que quería decir. — Estoy lista para... Eso — su sonrojo se vuelve más fuerte por lo que esconde su rostro en el cuello del rizado, Harry se encontraba en estado de shock.
¿Su pequeña Jade inocente dijo eso? No podía creerlo, ya se había librado de la apuesta hace dos días, por lo que quería que la primera vez de Jade fuera especial.
— Poopey — la llama con voz ronca. Ella lo mira avergonzada por lo que dijo. Él sonríe y besa su nariz. — Me alegra de verdad que estés lista, pero...
— ¿No debí decirlo, cierto? Soy una tonta — baja la mirada triste. — No debí decirlo yo... Soy una completa ilusa por...
— Jade Amelia Thirlwall Badwi, no quiero que vuelvas a repetir eso en tu vida, no eres ilusa, ni tonta; eres mía — sonríe marcando un hoyuelo. — Lo que quería decirte, era que quiero que nuestra primera vez sea especial. Te prometo que será perfecto — besa su frente. — Hay que dormir ahora, ¿si? — ella asiente con una ligera sonrisa mientras él se tumba a su lado, la mano de él se posó en su cintura para luego apegar sus cuerpos.
Entre besos y risas se durmieron juntos.
Eran muy felices... Pero esa felicidad no durará tanto.
