Ginger

52.- Cierra la puerta del congelador.

#NOVIERNEHDEYINYEH

Theo's POV.

—Chubby, no podemos ayudarte a estudiar para el examen si no vienes, ¿sabes?
—No puedo ir ahora Bianca, ya te dije que no sé si voy a aceptarlo.
—¿Theo?
—¿Entonces en qué quedamos, eh? ¿Vienes o no?
—Hablamos luego, ¿sí?
—Estaremos una hora más por aquí, si cambias de opinión me avisas.
—Está bien, adiós —colgué y sonreí a mi novia— ¿Qué pasa?
—No sé, ¿y a ti?
—Nada, vamos —tomé su mano y halé de ella hacia donde estaban los demás.
—¿Hablabas con Bianca?
—Eh, sí. Quería que vaya a casa de los Rizzo y...
—¿Y qué no sabes si vas a aceptar? —cruzó los brazos.
—Estás preguntando mucho hoy, ¿no? —besé su frente y sonreí.
—No intentes distraerme, hablaremos de eso luego.
—Eso quisiera —murmuré.
—¿Eh?

Oh rayos, sí me escuchó.

—Nada, nada. Vamos que Kim está gritando allá.

Safé.
El problema de no saber cómo decirle a Ginger que si daba ese examen de admisión, podía quedarme en Italia.
Los días pasaron y hacía lo que sentía que debía hacer. Estudié mucho, demasiado diría yo. Bianca y su novio me estaban ayudando mucho con eso ya que Mateo había conseguido que pudiera dar el examen.
¿Cómo? Ni idea. Mateo dijo que un hombre de negocios jamás revelaba sus secretos.
El problema es que estaba evitando mucho al grupo, a Ginger en especial y ella empezaba a preguntar.

—¿Se puede saber qué rayos estás haciendo fuera casi siendo las doce, Theo? —preguntó al abrir la puerta.
—Te prometo que te lo diré pronto.
—No Theo, tienes días diciendo esto, ¿qué te pasa? Has pasado más tiempo fuera que con el grupo... Conmigo —habló algo molesta... Y tenía razón.
—Huffy, es que no quiero adelantar las cosas.
—Es que en serio no te entiendo, Theo. Yo sé que no soy la novia más cariñosa, pero lo intento. ¿Es eso? ¿Ya no quieres estar conmigo?
—No, no. Eso no tiene nada que ver, Huffy, yo te quiero. Es que no puedo explicarlo ahora —hablé apoyando mis dedos sobre el puente de la nariz.
—Sigues con eso —negó con la cabeza y rio sin gracia— no lo sé, pensé que este viaje sería de lo mejores y no está resultando como tal. Haz lo que quieras, no me siento cómoda con esta situación.

Debí decir algo, ese día debí actuar y no quedarme parado como un tonto en la puerta mientras ella se iba.
Pero fue así, y no hice nada al respecto.
Por supuesto no quiso hablar conmigo los días próximos y con el asunto de los exámenes no podía hacer mucho. Estaba entre mi futuro y Ginger, aunque según yo, ambos estaban dentro de mi futuro. ¿Qué hacer entonces?

No hice nada durante seis años y seguía sin hacerlo aún luego de estar con ella. Estaba perdiendo mi oportunidad y ni siquiera sabía si seguíamos juntos ya. Me sentía un completo inútil.

—Bien, solo falta historia y terminaremos con todo esto, ¿cómo te sientes? —preguntó el novio de Bianca, Víctor.
—No lo sé, tengo a Ginger en mi mente mientras estudio y no puedo sentirme más culpable por dejarla sola.
—Amigo, tienes que contarle la verdad, liberarte de esto no te hará mal.
—Pero es que no puedo soltarlo así y ya. Es algo difícil.
—Theo, ya tienes dieciocho años, por favor —me retó Bianca cerrando el libro.
—Ya sé, pero sigo pensando que es algo difícil de hablar.
—Bien, tú te lo buscaste —sacó su teléfono y marcó— Hola hermana, tengo a un niño muy terco que hablará contigo. Sí, te quiero más, adiós —Ni siquiera dio a tiempo a nada y ya tenía el teléfono pegado a la oreja.
—¿Qué pasa, niño terco?
—Hola Abby.
—¿No le dijiste aún, verdad?
—No, y tu hermana más el novio me presionan.
—Mira Chubby, puedo decirte muchas cosas... Pero si no oyes algo que te guste, no lo harás. La vida es complicada, nadie dice que no. No todo siempre tiene que salir bien, ¿sabes? Nosotros no sabemos si Ginger será la persona con la que pasarás el resto de tu vida, es lo que tú quieres, claro... Pero los cuentos de hadas no existen y bien sabes que es así. Cuando somos menores, no pensamos de la misma forma en la que pensaría alguien mayor. Porque los adultos vamos ganando experiencia con el tiempo, ¿pero qué puede decirte alguien que se casó con el chico que quería? Pues sí, porque antes de Nate sabes que tuve un novio, y pensé que sería la persona con la que me iba a casar, o con el que tendría mi propia familia... Pero no fue así. Volviendo al tema de los chicos, por ejemplo: Si yo le pregunto algo a Sky o James, claramente no tendrán la misma respuesta que tú. Si a ti te pregunto por ejemplo, ¿cómo metes un elefante en un congelador?
—Uhm... ¿Cortándolo en pedazos?
—James, ¿cómo metes un elefante a un congelador?
—Abres la puerta, lo pones ahí y luego cierras la puerta —oí de lejos a mi sobrino.
—¿Lo escuchaste?
—Sí —sonreí mirando al piso.
—¿Lo ves? Alguien más pequeño siempre te dará respuestas más simples, no se hacen complicaciones, porque así es la vida. Los niños son mas inocentes... Así estás tú en este momento, intentando meter al elefante en el congelador.
—Entonces... Supongo que debo hablar con Ginger y ver qué pasa con el tiempo.
—En efecto.
—Te quiero, Abby.
—Yo también, Chubby. Llama cuando hayas cerrado la puerta del congelador, ¿sí?
—Está bien —reí.
—Te veo pronto, saludos a los demás.
—Igual por allá, adiós —colgué y miré a Bianca.
—¿Qué rayos vas a cortar en pedazos? —preguntó confundida y largué una carcajada.

Extrañaba estos consejos de Abby. Sin duda era la mejor cuñada.

—×××—

Tomé el pequeño papel en mis manos y lo volví a leer:

«Nada en esta vida sucede siempre como tú quieres, pero si la nena que creció dentro de mí por nueve meses y crié por diecisiete llora, haré que llores el doble. Feliz cumple. Con amor, Bonnie xx».

Tomé aire y lo guardé en mi bolsillo.

—Perdón —me asomé apoyando el brazo en el marco de la puerta.
—¿Qué? —preguntó mirándome.
—¿Podemos hablar?
—Ya estamos hablando.
—A solas, Ginger —hablé mirando a Kim y Lena.
—Mis amigas pueden oír cualquier cosa que quieras dec...
—Adiós —dijo Kim siendo seguida por Lena.
—También las quiero —gruñó Ginger negando con la cabeza.
—Ya sé que estás enojada conmigo, pero creeme que intento meter el elefante en el congelador.
—¿Qué? —preguntó totalmente confundida y negué con la cabeza.
—Es que estuve hablando con Abby y... Olvidalo, sus consejos raros pero buenos me trajeron hasta aquí.
—No entiendo nada, Theo.
—Te voy a decir esto, pero promete que no me lanzaras un zapato o algo hasta que termine.

Se encogió de hombros y me acerqué para sentarme a su lado.

—He dado un examen.
—¿Un qué?
—Un examen, Huffy. Un examen de admisión.
—¿Y?
—El examen es de una universidad... aquí.
—Oh.
—¿No vas a decir otra cosa?
—No lo sé, no sé qué decir... ¿te dieron los resultados? —negué con la cabeza.
—Me los darán dentro de esta semana.
—Pero... Nosotros nos vamos mañana.
—Exacto.
—¿Te vas a quedar? —preguntó asombrada y solo asentí.
—Me han dicho que debo estar aquí en ese momento, así que como los exámenes finales empiezan en dos semanas, perderé un par de clases esta semana.
—No me lo esperaba —dijo mirándome— ¿Es por eso que estuviste así?
—Sí, no sabía cómo contarte.
—¿No estarás esta semana en Counterville? —negué con la cabeza y sonreí de lado tomando su mejilla.
—No te ves enojada.
—Es que no lo estoy, solo quería saber qué rayos había estado pasando, y ahora lo sé. Estoy bien con eso.
—¿Segura?
—Por supuesto —sonrió sin mirarme y suspiró— ¿Cómo sigue todo esto?
—No lo sé, yo solo tomé esta oportunidad cuando Mateo la presentó.
—¿Es buena la universidad?
—Está dentro de las mejores aquí en Italia.
—Entonces espero que te acepten, estarían perdiendo a una gran persona.
—Gracias Huffy.

Ella me miró y finalmente me abrazó con fuerza.

—Me harás mucha falta estos días.
—Y tú a mí, Huffy, como no tienes idea.

Ginger's POV.

Olvidó que el martes cumplo dieciocho años.

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Oh-oh.

Capitulo para compensar la pequeñez del anterior con un Theo's POV. Perdón por dejarlos así, pero ya falta cada vez menos para que termine...
Hoy me dio un subidón de inspiración y bueno...

Espero que todos hayan cerrado la puerta del congelador.

Pd: Para quienes querían saber que decía en la nota de cumple de la mamá de Ginger, jeje.

TAAAAREAAAAAA:

La misma tarea del anterior capitulo, pero con nombres para el chico :).

Gracias por todos sus mensajes y comentarios, de verdad.
Últimamente no lo digo mucho, pero son increíbles. No hay palabras para describir lo que siento cada vez que abro un mensaje suyo.

Ay, ya se puso a fastidiar la Chime asdfghjklñ.

Pd: Perdón a todos los que me siguen en twitter y fueron víctimas de todos los RT's y tweets sobre mi fangirleo con la selección, no me gusta el fútbol, pero cuando juega mi país memosiono.

Quiero contarles que estoy editando True Colors y si quieren ayudarme con arreglar lo de sus países, aún pueden hacerlo. No muchas personas me escribieron para eso y no puedo editarlo si no me ayudan con eso ): de todos modos recién estoy por editar el capítulo doce, pero ya se acerca la parte de los viajes, so...
Si me ayudan, les regalo un caramelo de limón (?).

Los quiero.

Baaaaaaai✌