18

1.3K 141 9
                                    

no recordaba el momento en el que había caido dormida, tan solo que me había pasado a mi habitación porque no soportaba sentir su presencia en todos lados

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


no recordaba el momento en el que había caido dormida, tan solo que me había pasado a mi habitación porque no soportaba sentir su presencia en todos lados. probablemente me había quedado dormida entre llantos, aquello confirmé cuando me miré en el espejo del baño y pude distinguir los ojos hinchados.

por un momento, apenas me desperté, me olvidé de que matias había estado con otra persona y quise buscarlo. cuando lo recorde otra vez el mundo se me vino abajo, no quería salir de la habitación y enfrentar la situación, sería prácticamente perderlo definitivamente y no quería.

me lavé el rostro intentando disipar algun rastro de que estuve llorando, cosa que fue imposible, cualquier persona que prestara atención se podía dar cuenta.

salí de mi habitación directo a la cocina, no tenía hambre pero algo debía ingerir si no quería caer desmayada en pleno aeropuerto. matias ya estaba sentando en la mesa, como siempre, con la televisión prendida.

me sonrió abiertamente pero al ver mi rostro toda facción que indicaba alegría se vio perjudicada, su semblante cambió al instante. se separó de la silla y se acercó hacia mi, intento tocarme pero no se lo permití, di un paso hacia atras manteniendo la distancia. ya quería llorar.

— ¿qué pasó dali? — preguntó parado a una distancia prudente, no volvió a intentar acercarse, sentía que eramos dos extraños

me parecía impresionante como las cosas podían cambiar tan fácilmente de un día para el otro. quería odiarlo por lo que me estaba haciendo, por lo mucho que me había lastimado, pero no podía, probablemente lo iba a amar toda mi vida.

no respondí, sabía que si alguna palabra salía de mi boca iba a desbordarme en llanto.

— no dormiste en mi casa anoche ¿tiene que ver con eso? — volvió a preguntarme al ver que no emitía ningún sonido

quería gritarle que sí, que la camisa que había encontrado arruinó toda construcción mental que tenía sobre nosotros. que lo odiaba por eso pero tan solo pude asentir sintiendo como las lágrimas amenazaban con salir.

— ¿por qué? ¿tan insuficiente soy que tuviste que estar con otra? — dije soltando toda la presión que sentía en el pecho, su rostro volvió a cambiar, esta vez mostrando signos de arrepentimiento

no le creía ninguno.

— te juro que todo tiene una explicación — soltó aquella frase tan típica de hombre infiel que solo pude soltar una risa irónica

— no quiero tus explicaciones matias, no estarías a punto de darmelas si no hubiera encontrado la camisa llena de labial. guardatelas para vos, después de todo no somos nada ¿no?

mi estómago se revolvió apenas salieron esas palabras, quise correr. deseaba salir de esa situación, dar el concierto que debía en milan y esconderme en algun hotel hasta que encontrara un buen departamento para alquilar lejos suyo. no soportaba tenerlo delante mio.

— saben muy bien que si somos algo, no corras de esto también por favor. me confundí dali, apareció alguien y me confundí — dijo también con lágrimas en los ojos

en ese mismo instante me quise morir, una cosa era que haya sido por una noche pero que estuviera confundido me hacia sentir incluso aún más insuficiente. no podía creer que había sido tan poca cosa para que él pensara en otra persona estando conmigo.

— ¿y era más fácil estar con ella a escondidas que plantearmelo? dios matias, fuimos amigos por años, se supone que me podes contar cosas como esas y que no me mentirias, porque me mentiste diciendo que salías con amigos

la tristeza se mezclaba con enojo, estaba también decepcionada. nunca pensé que iba a vivir una situación como esta siendo él quien ocasionaba mi llanto cuando en realidad siempre me consolaba.

— se que estuve mal y te juro que me arrepiento. dame una segunda oportunidad, dejame demostrarte que si te puedo hacer bien

lo dudé un segundo, quise aceptar, pero no me lo pude permitir. estaba demasiado herida, no podía siquiera mirarlo a los ojos.

— no puedo matias, creo que no puedo ni explicar cómo me siento. voy a ir a dar el concierto en milan, vuelvo y me busco un departamento. me duele que estemos en la misma habitación

— dali...

— necesito que respetes mi decisión, la cual tuve que tomar por tu culpa. no me hagas sentir culpable a mi por esto cuando vos lo ocasionaste

sin decir más nada, ni tampoco esperar respuesta. fui hacia la que era mi habitación para cambiarme rápidamente, tomar la valija y salir del departamento con lagrimas corriendo por mis mejillas. ya me compraría algo para desayunar en el aeropuerto, no podía pasar más tiempo con su presencia a mi lado, sentía que me ahogaba.

aunque al salir de la puerta supe que le estaba dejando parte de mi corazón, que siempre iba a ser suyo.

opuesto completario - matias souléWhere stories live. Discover now