Chat 31: Aunque fueras Lesya.

1K 174 94
                                    

—¿Cómo que Dión es Solecito? —cuestiona Hywel, abriendo mucho los ojos

Ups! Ten obraz nie jest zgodny z naszymi wytycznymi. Aby kontynuować, spróbuj go usunąć lub użyć innego.

—¿Cómo que Dión es Solecito? —cuestiona Hywel, abriendo mucho los ojos.

—Lo que te he dicho —susurro, esperando que nadie más nos escuche.

Tampoco era probable que alguien lo hiciera con todo el ruido de la cafetería, pero más valía prevenir que curar.

Mi mejor amigo comienza a reír sin gracia.

—¿Es una broma? —se enseria. Niego con la cabeza—. Dios Santo, de todos, de verdad os ha juntado a vosotros.

—Te dije que era un desgraciado en la vida. —Me encojo de hombros.

—¿Tú no deberías estar más feliz por eso? Digo, con lo mucho que suspiras por Dión...

—¡Mentira! —chillé sin dejar que terminara su frase.

—Guau, ¿qué ha pasado aquí? —Dess frunce el ceño, sentándose al lado de Hywel.

Sonrío con inocencia.

—Eh... Nada, que Hywel y yo estábamos jugando a... ¿mentira o verdad? —miento, desviando la mirada.

—Eso es mentira —indica Dión, apareciendo junto a su mejor amigo.

—¿Y tú qué sabes? —le reprocho.

—No hay que ser muy brillante para saber que eres un muy mal mentiroso, Les. —Se encoge de hombros al dejar su bandeja sobre la mesa.

Mimimimi nadie te ha pedido tu opinión, don Inteligencia.

—La madurez en persona, también conocida como Lesya Alexei Sinclair —dijo burlonamente.

—¡Mi nombre completo no!

—¿Por qué no? Es lindo —se mofa.

—¡Dess! ¿Cuál es el segundo nombre de Dión? —pregunto haciendo un puchero.

Este se encoge de hombros.

—Lamentablemente para ti, solo se llama Dión.

Junto las cejas y lo miro con molestia.

—Qué pena, Alexei —se ríe el pelinegro.

—Te voy a arrancar esos pendientes como te sigas burlando de mí, gnomo de jardín —amenazo.

Él solo alza ambas cejas antes de estallar en carcajadas.

—No te ofendas, Lesya, pero después de hablar durante tanto tiempo, no te veo capaz ni de matar a una mosca.

—Que te calles. —Me sonrojo—. ¿Qué sabrás de mí?

Saco el móvil y comienzo a escribirle por LoveLink para que deje de meterse conmigo en la vida real.

Además, me veía capaz de acabar revelando mi identidad solo para molestarlo y ahora mismo, aún consciente, no me parecía tan buena idea.

A Dión le gustaba Moon, no yo. Lo había dejado claro desde hacía tiempo; yo no le gustaría jamás.

Si te dijera que no © ✓Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz