Chat 6: Tú me atraerías más que ella.

1.1K 174 101
                                    

Nada más entrar al instituto, visualizo un cartel gigante que decora el portal, felicitando al equipo de natación

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Nada más entrar al instituto, visualizo un cartel gigante que decora el portal, felicitando al equipo de natación.

Eso me irrita, porque ahora significa que el equipo de vóley tiene que ganar las interescolares para poder superarlos, también significa pasar el resto del día escuchándolos presumir y ver cómo los demás les dan atención. Me niego a que tengan más reconocimiento que mi queridísimo equipo.

Sé que seguramente hoy no voy a poder meterme con Dión porque estará ocupado, así que eso me decepciona un poco porque es divertido sacarlo de quicio.

Entonces, lo veo. Está rodeado de gente que está riendo con él, seguramente por lo que dice el cartel.

"¡Felicidades al equipo de natación por quedar en el primer puesto de la competencia regional!"

Cuando me acerco, me mira, callándose al instante.

—Sinclair —pronuncia lentamente.

—Enhorabuena, Ainsworth —digo genuinamente.

—Gracias —agradece, sorprendido.

Sonrío con inocencia y me dirijo a mi taquilla, en donde Hywel me espera.

—Asombroso —suelta.

—¿Qué cosa? —pregunto.

—Es la interacción más tranquila que os he visto tener.

—Sí, bueno, hoy soy una persona de paz, no siento agresividad acumulada —explico.

—Dices esto ahora, pero a la más mínima provocación vas a explotar —silba.

—Déjame pensar que puedo ser moralmente superior a Dión por una vez, por favor —bufo.

—Siempre compitiendo.

—Solo con Dión. —Me encojo de hombros.

—Ya decía yo que lo de antes había sido demasiado extraño. ¿Por qué siempre tienes mi nombre en tu boca? —cuestiona el susodicho.

—¿Es una afición tuya escuchar conversaciones ajenas? —Me cruzo de brazos y me giro para verlo.

—Cuando estoy implicado, sí. —Alza una ceja.

—Debes creerte muy importante como para que yo esté hablando de ti —replico.

—Podría pensar lo contrario si no hubiera escuchado claramente mi nombre. —Frunce el ceño—. Y a menos que haya otro Dión en el instituto, creo que al que has mencionado soy yo.

—No sé de qué hablas. —Desvío la mirada.

—Sé que cuando mientes desvías la mirada, Sinclair.

—No es verdad. —Vuelvo a desviar la mirada automáticamente.

Maldigo en voz baja y lo escucho burlarse de mí.

Si te dijera que no © ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora