🔥 Capítulo diecisiete 🔥

257 30 6
                                    

Asthon le dió un empujón a su hermano hasta alejarlo de mí, cómo siempre, segundos después, dejó un ligero apreton en mi hombro en señal de apoyo, quizá.  Me fijé su madre, quién, ajena a toda la retorcida situación entre sus hijos, mantenía una amplia sonrisa en el rostro, como si nada, tal cuál el Wason.

—¿Es normal que deje a alguien con la palabra en la boca?

—Disculpalo, cariño —intervino de golpe la mujer— Ha de ser algo importante que no puede dejarlo pasar.

Fingi comprender la situación con una corta mueca, me crucé de brazos, sintiendo la mirada juzgona de uno de los chicos en mi nuca.

Por segundos que parecieron eternos, en dónde parecíamos unos imbéciles todos de pie esperando el encuentro del hombre que nos había dejado solos por bastante tiempo, él regresó, como si nada, guardando el celular en su bolsillo.

Volvió a mirarme, y sin esperarmelo, me tendió una amable y posible falsa sonrisa.

—Asi que eres tú de quién me habló Ana...—pronunció lentamente— Te seré honesto, pensé que era mentira, solo que al verte aquí, comienzo a creermelo un poco más. ¡Bienvenida a la familia!

—¿Qué?

¿Qué?

Al parecer, mi mente no era la única que había juzgado y esperado algo más sin saber. Mateo fue el único en reaccionar al instante. Creo que al igual que yo, esperaba otro tipo de reacción, una menos humana... más monótona.

Escuché cómo alguien suspiraba, como si el alma le volviera al cuerpo, no tuve que girarme para saber quién había sido: Asthon.

Solté una risa nerviosa aún frente a su mirada poco juzgadora ahora. Pasé mi cabello detrás de mis hombros manteniendo la poca tranquilidad que no tenía.

—Gracias señor —murmuré, un poco más tranquila ahora— Mi nombre es Janine.

—Eres de tendencias latinas, ¿me equivoco? —inquirió, acercándose para dejar un corto beso en mi mejilla.

Al tiempo que él se alejó de mí, me fijé en su rostro y sonreí por el simple hecho de que haya notado mis rasgos a simple vista.

—Si, mi papá es de Venezuela.

—¡Que sorpresa! —agregó la mujer, como siempre adentrándose a la conversación.

Mateo carraspeo su garganta, llamando la atención de su padre, quién pareció verlo por primera vez en el sitio, alzó sus cejas sorprendido.

—Mateo...no sabías que venías.

—Queria presenciar este momento —respondió al instante— ¿En serio crees que ella es la novia de Asthon?

Me tense de golpe al instante, dándole una mirada rápida al chico volviendo a mi postura habitual: mantener el control.

—Ay, ja,ja, ¿por qué no lo sería? —lo miré.

—Janine, discúlpame, mi hijo no suele pensar muy bien las cosas —interrumpió lo que sea que su hijo estuvo a punto de decir.

A todas estas, Asthon se había mantenido al margen, a mi lado, rozando los dedos de mis manos con los suyos, parecía bastante inquieto, no había dejado de balancearse sobre sus pies, ajeno a la situación.

—No se preocupe, —le reste importancia al asunto— creo que no le caigo muy bien.

Hice un mohin falso, casi al mismo que un increíble chillido agudo resonaba por toda la casa. Me sorprendió demasiado que aún estando tan lejos el grito de Nhoa pudiera resonar tan fuerte hasta espantar a todos los presentes.

Departamento 203Where stories live. Discover now