Cura de Owen 10

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—Segun está revista, ocho de cada quince matrimonios fracasan por infidelidades masculinas.

Las abarrotadas calles de knightsbridge están totalmente congestionadas yo sigo mirando atravez de la ventana tratando de marcarle a papá y me manda a buzón. Hay trauseuntes qué caminan por los andenes con bolsas en sus brazos. Me aseguro qué Owen haya llegado a su lugar de destino junto a sus amigos mientras doy órdenes qué, lo cuiden en todo momento, aveces como madre me gustaría guardar a mis hijos en un lugar que esté a salvo, y no salgan, no socialicen así no corren peligro pero tienen el derecho de hacerlo.

Un vago recuerdo llega a mi mente de Brenda, Luisa y yo saliendo de compras luego de cobrar nuestro sueldo en el comandó.

—Ya llevamos aproximadamente quince años casadas...—reitero.—Por los momentos no eh visto nada raro en Christopher solo su carácter petulante de vez en cuando.

—Ese es el detalle querida amiga quien en su sano juicio té montaria los cuernos, semejante ninfa ojos azules —comenta Luisa deteniéndose en un semáforo.

Me río junto a ella.

—Hay una lista que ayuda a bajar el índice de infidelidad aparte de tener una buena comunicación el sexo es la base de todo eso.

—¿Porque estamos hablando de sexo en estos momentos?—pregunto shokeada.

El ring de mi teléfono suena y me apresuró a tomarlo, y veo la imágen de mi hija de fondo.

—¿Mamá?—resopla atravez de el micrófono y la escucho quejarse.

Mi corazón bombea con rapidez cuando escucho la voz de mi esposo  preguntándole con quién habla, me muerdo el labio pensado que Christopher me debe estar odiando.

—Si cariño cómo té va en Hawái—le pregunto y chilla de felicidad y escucho qué Luisa se entre carcajea.

—¡Súper bien! Papa hablo por la mañana con owen, y yo estoy ¡En la playa puedes creerlo! Esto es fantástico hay chicos muy lindos.

La señal es pésima y cuelgo despidiéndome dé ella, y se compromete en mandarme fotos y regresar pronto.

(....)

La piel me pica a la hora de que Luisa estaciona en la mansión y me apresuró a salir de la camioneta ignorando varios empleados que tratan de hablarme, abro la puerta y visualizo que la sala de encuentre sola «Excelente»

Seguramente está en su habitación, Luisa me sonríe y me hace señas que irá hacia la cocina para destapar una botella de champagne, me recargo sobre el sillón suspirando. Cuando escucho un grito y reconozco que fue de ella.

—¡Luisa!—grito y mis piernas corren hacia la cocina.

La veo apuntándole al adolescente qué se encuentra en la mesa gustosamente comiendo, voy hacia ella tratando de calmarla pero siendo ella psicologa criminalista no logra controlarse. Damon se pone nervioso y se baja de la silla palideciendo. «Pobre, ya es la segunda persona que lo apunta con un arma está semana »

—¿¡Que carajos hacé Damon Mascherano en tu casa!?—la empujó agarrando su arma, y enseguida coje un cuchillo de la encimera —Rachel no se qué tenga qué ver con qué Antoni este desaparecido pero, esto es muy mala idea de secuestrar su hijo...

—¡Baja eso Luisa! Prometo explicárte pero baja eso cuidado con lo que haces.

La tomo de el codo y le arrancó el cuchillo dejando lo atrás de mi, ella no pierde la vista fija de Damon y el tampoco deja de observarla. Luisa me mira mal y sale huyendo de la cocina, escucho las llaves de su deportivo y salgo de la cocina sin antes decirle a Damon que ya vendría.

Fanfic Pecados PlacenterosWhere stories live. Discover now