SMERALDO

🌼 Capitulo 20 🌼

–Perfecto–

ADAM

La luz del sol golpeó contra mi cara apenas se asomo por mi ventana.
Este día tenía que ser especial.

Baje rápidamente las escaleras rumbo a la cocina para encontrarme con mi madre haciendo un delicioso desayuno.

—Buenos días mamá —. Le saludé con un beso en la mejilla.

—¡Vaya! ¡El día de hoy estás muy feliz!

—Lo estoy —. Le regale una sonrisa de oreja a oreja mientras me sentaba en la mesa para morder una tostada.

—Se puede saber, ¿Por qué?  — me preguntó con una sonrisa traviesa.

—Le pediré ser su novio a la chica que me trae loco —. Reí por lo bajo.

—¡Woow! ¡Que chica tan afortunada!

—No —. Dije moviendo mi cabeza —Yo soy el afortunado.

—Te perdí, cariño.

—No digas eso mamá, sabes que te sigo amando. Tu eres la que me ha soportado todos estos años, nadie llega a eso.

—Oh vaya, entonces me siento orgullosa de mi misma. Bueno, ¿Puedo saber quien es esa chica?

Asentí con la cabeza dejando a un lado mi café.

—Se llama Jane Miller. La conocí en el instituto y déjame decirte que ella es diferente a todas las chicas que conozco.

—¿Encerio? ¿Qué la hace tan especial? — pregunto con una sonrisa mientras se sentaba frente a mi.

—Es que ella hace mi corazón latir como nadie en el mundo. Ella me ha cautivado por lo que dice, por lo que siente, por lo que no muestra y por lo que si. No me importa su físico porque, cuando tú abres un libro dejas de lado la portada y te concentras en lo que tiene dentro. Eso te cautiva y te hace enamorarte de el. Así me enamore de Jane, me enamore cuando ojie las páginas de su libro y no me importo la portada, sino, lo que tenía dentro. Ella es especial en todos los sentidos, porque con ella la vida es más bonita.

—Oh, Adam... Te pareces a tu padre cuando me conoció. El también me decía esas cosas y ahora me alegra que todo se haya resuelto... — mi madre frunció el ceño. —Cariño, perdón por todas las peleas que tuvimos y dónde tú estabas presente. No merecías eso...

—Mamá, está bien... Tal vez si dolió pero eso ya quedó en el pasado. Tenemos que concentrarnos en el presente y crear los mejores recuerdos hechos.

—Lo se...

Me levanté de la silla y abracé a mi madre.
Nuestra familia se había vuelto disfuncional desde esa mentira pero ahora estábamos bien.
Se que no es fácil que una pareja resuelva sus problemas cuando se separan pero a veces, hay que mirar las cosas con un rayo de esperanza.
El amor no siempre suele funcionar y eso también lo tenemos que aprender.

Me separé de mi madre y le dejé un beso en la frente.

—Te amo mamá.