Capítulo 13 : Besa al chico

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No era la primera vez que William Byers se despertaba deseando quedarse en la cama todo el día, solo para evitar enfrentarse a nadie. Esta siempre fue una tarea difícil, especialmente cuando uno tenía a Joyce Byers como madre. Recordó la primera vez que no quiso salir de su habitación en absoluto.

Era principios de septiembre y Will tenía 5 años y 6 meses, un hecho del que le gustaba presumir a cualquiera que lo escuchara. Sin embargo, Lonnie no era uno de ellos. Cuando Will, de cinco años, colocó un dibujo que había hecho frente al televisor, interrumpiendo un juego de béisbol, para mostrarle a su papá lo que había creado y que volvía a contar todas las cosas que haría en los primeros días de clase, el hombre simplemente tomó el papel con dureza y lo arrojó al otro lado de la habitación antes de gritar que no haría amigos por actuar como un hada.

Las bromas sobre él , y al día siguiente conoció a un niño maravilloso que fue lo suficientemente valiente como para pedirle a Will que fuera su mejor amigo, y Will dijo que sí. Nunca se arrepintió de haberle dicho que sí a Mike.

“Mike Wheeler”, suspiró Will, diciendo su nombre en voz alta.

No había pensado en Mike en días. Se colocó una almohada en la cara con frustración. ¿Le gustaba Mike, verdad? Esa era toda la razón por la que estaba en la casa de Steve. No quería estar cerca de Mike; necesitaba superarlo y sacarlo de su mente

Y funcionó. Otra persona ocupaba ahora su mente. Debe haber algo mal con él si solo se fija en personas que nunca le devolverán su afecto. Primero su mejor amigo, y ahora Steve.

Presionó la almohada de nuevo, sintiéndose confundido. ¿Seguía obsesionado con Mike? ¿Estaba enamorado de él? Solía sentirse nervioso alrededor de Mike y buscaba su presencia cada vez que entraba en una habitación. Pero ¿por qué ya no se sentía así?

Se preguntó si Steve era la razón por la que se estaba olvidando de Mike. ¿Alguien podría ser reemplazado tan fácilmente? Pero Mike no podía ser reemplazado. Era el mejor amigo de Will, y siempre lo sería. Steve era solo amigo de Will, ¿verdad?

Un amigo que había besado a Will.

Se quitó la almohada de la cara y cerró los ojos, permitiéndose pensar en la noche anterior. La forma en que Steve sostuvo su rostro como si estuviera sosteniendo la cosa más preciosa del mundo. Y sus labios: era obvio que Steve tenía experiencia porque Will nunca antes había sentido algo tan intenso. Ni siquiera le importó cuando la lengua de Steve estaba en su boca. Sacudió la cabeza, sintiendo que su rostro se calentaba.

Will sabía que era su primera y única experiencia besando, pero si eso era lo que sentía besarse con alguien, se sentía como un idiota por estar enojado con Mike y Lucas por dejarlo para intercambiar saliva con El y Max.

Vale la pena.

Will resopló antes de mirar a la puerta como si fuera su enemigo. Sabía que tenía que pasar por allí y enfrentarse a Steve, pero ¿qué podía esperar? Una frialdad como la de ayer y un ‘lo siento, fue un error’, o algo por el estilo.

Gimió porque debería haber rechazado besar a su amigo. Debería haber dicho que no, incluso si lo atormentaran los ‘qué pasaría si’. Tuvo la oportunidad de decir que no, pero estaba débil, y Steve se veía hermoso, y sí, quería besarlo. No sabía cuánto hasta que lo hizo.

Pero ahora, tenía que lidiar con las consecuencias. Tuvo que ir allí y fingir que no era nada cuando sabía que sería una mentira.

‘Los amigos no mienten’, era el lema del Partido.

Era una suerte que Steve no fuera parte del Partido, pero ahora Will ni siquiera estaba seguro de si todavía lo consideraban un amigo. Aunque Steve había estado aceptando la franqueza de Will acerca de que le gustaban los chicos, ofreciendo su hogar como un espacio seguro, que un chico sintiera algo por él probablemente no era lo que Steve había anticipado.

yo seria tu amorWhere stories live. Discover now