Capítulo 44

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18 de Junio 2023

Habíamos terminado de cenar y pensaba en hablar con Paulo. Estaba recostada sobre el marco de mi puerta esperando que pase.

—Joya - lo llame. Se acercó a mi y le dije para entrar. Confundido acepto.

—Qué paso? - pregunto sentandose en la cama.

—Vos le contaste a Joaquín? - dije yo desde la puerta.

—No. Nada le dije - respondió.

Suspiré aliviada —Joaquín no te había contado que cortamos? - tenía que empezar por ahí para llegar hasta donde quería.

—No me contó mucho. Solo dijo "deje todo con Delfi" y no le quise hablar más del tema porque parecía estar mal - Auch. Mi punto era que me cuente si Joaquín estaba muy mal. Porque por como se preocupo el otro día me asusto. Además, lo sospechaba. No hablamos mucho, es más, diría que hasta me ignoro.

—Querés qué te cuente yo? - asintio.

Le conté todo lo de ese día. Que el lloro, yo llore y que a ambos nos costó. Le conte de la foto y le conté la "aclaración" de días después. Dijo estar de acuerdo conmigo. Decía que no le encontraba lo lindo a estar de novio con ese pensamiento, y tenía razón. Eso te impide disfrutar los buenos momentos.

Ahora el era el que hablaba. Me confeso que a Joaquín lo vio bastante mal pero no le decía porque. Y una vez hasta lo escucho medio llorando en el baño. Ellos compartían pieza entonces estaban casi siempre juntos. Me rompió el corazón escuchar que había llorado y más ser posiblemente la causante de ese llanto. No quería cargar con su dolor interno.

Lo acompañe hasta la puerta y le agradecí su tiempo. Le di un beso y lo mandé a dormir porque ellos entrenaban muy temprano. Cuando salió de mi habitación algunos que todavía deambulaban me miraron raros. Bueno basta, yo sabía que no había pasado nada y me imagino que no van a pensar eso de Paulo. Además tiene novia.

Apenas se fue me acerque a la cama dejando que la puerta se cierre sola pero antes de eso alguien entro y la cerro por mi. Julián.

—Siempre estás así de linda? - me sorprendió su atrevimiento. Luego de ese beso no hubo otro. Algún que otro día me tiraba un piropo o halago pero yo solo le sonreía. También, nos mantuvimos bastante escondidos de los chicos. Aunque no nos volvimos a besar, ni un poco, siempre estábamos en esa onda.

—Siempre fuiste así de chamuyero? - levanté una ceja.

El aún parado, acercó su cara a la mía y me agarró del cuello para besarme.

4:00 AM

Tocaron mi puerta de una forma rara haciendo que me despierte. Mire mi celular y ví, las cuatro de la mañana. Dios quién no me deja dormir.

Abrí la puerta, un poco para que solo se vea mi cara, de mala gana pero me cambio cuando ví a Joaquín.

—Qué pasa Joaco? - me frote la cara por el sueño. Antes de que respondiera ya había entendido la situación. Tenía una botella en su mano y su aliento no era muy amistoso, sin contar que se le dificultaba estar parado frente a mi. Se tambaleaba cuál gelatina.

—Delfina qué me hiciste - decía alargando las palabras con los ojos cerrados.

Cerré la puerta en su cara y desperté a Julián.

—Ju - le moví el hombro —despertate un toque - abrió los ojos y me sonrió. —me vas a matar, pero podés ir un toque al baño? Yo te digo cuando salís. No va a ser mucho - bese mi dedo en forma de promesa.

Again » Julián Álvarez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora