Infieles (XiuYeol)

Capítulo 1

. - ¿Sabías qué te amo y eres lo mejor de mi vida? - Le repitió Jondae como cada mañana al chico pelirrojo que se encontraba entre sus brazos.
.-Si Chennie, lo sé, y sabes que también te amo como nada en el mundo. -Respondió Minseok a las cursilerías de Jondae aún que no fuese lo suyo.

Eran una pareja tan dispareja...
Jondae era más chico, pero parecía más grande, era cursi y atento todo el tiempo, y amaba estar pegado a Minseok todo el día.

Minseok era el mayor pero su cara era la de un niño y su estatura no ayudaba mucho, era reservado y no siempre le gustaba mostrar afecto, con Chennie como le gustaba llamar a su esposo desde hacía ya 5 años era solo un poco diferente, lo trataba con amor y era cursi de vez en cuando, pero odiaba el hecho de que Jondae se la pasara pegado a él como un chicle y dio mil gracias al cielo cuando éste entró a trabajar como licenciado ya que no lo veía toda la mañana y así descansaban un poco uno del otro, por otro lado Jondae estaba realmente triste de no verlo durante unas horas y el que su casa se encontrara a las afueras de la ciudad no lo hacía sentir mejor, por lo que cada que salía del trabajo compraba algún pequeño detalle para su bollito como le gustaba apodarle al su amado esposo.

¿Iras de compras hoy? . -Pregunto Jondae mientras trataba inútilmente como todas las mañanas arreglarse el nudo de la corbata. -

Si, si iré de compras hoy Chen, ¿Se te ofrece algo? -Preguntó el pelirrojo mientras le acomodaba el nudo de la corbata finalizando con un beso. -

- ¿Podrías preparar pasta y pollo esta noche? Hace tiempo que no preparas algo así.

-Bien, si eso quieres iré a de compras más tarde, ¿Algo más?

-No, gracias cariño, eso es todo, te veo más tarde. -Dijo por ultimo antes de darle un beso y salir por la puerta hasta su auto y dirigirse a trabajar. -

Minseok terminó de arreglar y limpiar la casa para luego alistarse, hoy era un día largo y quería salir temprano a la ciudad.
Terminó de alistarse y tomó las llaves de la camioneta para ponerse en camino hasta la estación de trenes ya que hacía mucho viento y no era seguro manejar.

Ya eran las 4 de la tarde y Minseok había terminado sus pendientes, ahora tenía que hacer la parte difícil que era buscar un taxi en medio de todo ese alboroto provocado por el fuerte viento. Pasaban uno tras otro y todos parecían no verlo, comenzaba a desesperar y el viento que lo jaloneaba comenzaba a ponerlo de mal humor, Minseok seguía con la mirada clavada en los taxis hasta el momento en el que sintió su cuerpo chocar con algo cayendo de rodillas, en ese instante volaron hojas, rodaron latas de salsa, se escucharon maldiciones de una voz gruesa y su rodilla ardió... -

. - ¡Maldición¡¡Mis libros! ¡Mis preciosos libros! -Gritaba un alto y malhumorado joven con un extraño acento mientras las hojas de sus libros volaban. Manseo lo ayudaba a recoger algunos libros, hojas y sostenía sus cosas en otra mano haciendo muecas a causa del ardor en su ligeramente abierta rodilla. -

. - ¿Disculpa... ¿Podrías ayudarme a conseguir algún taxi, yo recogerse tus cosas? - Sugirió el pelirrojo. -

. -Claro que sí, pero será algo difícil con este viento, dejarme ver tu herida. -

. -Es algo muy pequeño, de verdad siento haber ido distraído y que tus libros de hayan maltratado. -

. -No te preocupes, si quieres...podrías pasar a limpiarte a mi apartamento, vivo justo aquí. - Propuso el de acento extraño justo cuando un taxi vacío se paró después de muchísimo intento. -
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¿Qué hará Minseok? ¿Tomara el taxi?
¿Ira al departamento de un desconocido por una insignificante cortada?
Aún no lo sabemos, pero si podemos decir que su vida cambiara pese a su decisión.