A prueba ; seulrene.

Prólogo

(previo)

POV JOOHYUN

⸺¡Hyunnie! ¿Quieres darte prisa? ¡Llegaremos tarde!

Dios . . . ¿cómo podía ser tan mandona?

⸺Seulgi-ah . . . amor . . . tenemos tiempo, ¿esta bien?, tu vuelo sale en tres horas.

⸺Lo sé, lo sé, pero aun tengo cosas que hacer. Tengo que documental el equipaje, encontrarme con Wendy y juntar los documentos de las dos. ¡Taeyeon! debo llamar a Taeyeon para que me de los datos del hotel. ¡Oh! y además . . . ⸺ No la dejé terminar.

Salí del baño lo más rápido que pude para callarla de una buena vez. Con un beso, eso es obvio. Como solo yo se hacerlo.

⸺Hablas demasiado cuando estas nerviosa, ¿lo sabías?⸺ Le dije sonriéndole pícaramente.

⸺Y tu te tardas años en arreglarte. Lo cual, por cierto, sigo sin entender. Irás a dejarme al aeropuerto, Joohyun, no es ninguna gala.

⸺¡Hey! te irás por dos semanas. ¡Dos semanas Kang! Tienes que llevarte la más hermosa ultima imagen de mi.

Esta vez fue ella quien se inclinó un poco hacia mi, sellando mis labios en un tierno beso. Teníamos una sincronía que era única. Después de un momento se separó lentamente de mi y me quedo mirando con esos ojos que me hacían estremecer desde tiempos inmemorables.

⸺Tu siempre estas hermosa⸺ Dijo dedicándome una sonrisa, esa sonrisa que me hacia perder el aliento en una fracción de segundo. ⸺Pero en serio. Tenemos que irnos ya. No sabemos como vaya a estar el transito, el estacionamiento. Y hoy en las anunciaron que iba a llover. Además . . . ⸺ Salió caminando en dirección al auto.

"Ay, Seulgi" pensé entre un ligero suspiro mientras tomaba mi bolso junto con las llaves del auto "hay cosas que nunca cambian y, seguramente, nunca van a cambiar".

Acomodé mi cabello por ultima vez, asegurándome de que todo estuviera en su lugar, disponiéndome posteriormente a partir detrás de ella.

El camino fue bastante tranquilo. Seulgi me comentaba con gran entusiasmo algunas de las ideas que tenía acerca de su proyecto. La verdad es que no tenía ánimos de escucharlas. No me mal interpreten, estoy muy feliz por ella y tan orgullosa . . . pero se irá dos semanas completas. Serían 14 días, 336 horas, 20.160 minutos e infinidad de segundos lejos de ella. Qué más daría por acompañarla esta vez.

Es increíble pensar cómo ha pasado el tiempo. Conozco a la hermosa mujer que va en el asiento del copiloto desde preparatoria y, cada vez que la miro, es como la primera vez. Aun recuerdo aquel día, un encuentro tan casual que te costaría creer que ese pequeño instante fue el inicio de una gran historia. Pero el amor es así, supongo. Llega cuando y de la manera que menos te lo imaginas, y no es algo en lo que tu cabeza o razón puedan influir demasiado.

(pasado)

⸺Unnie, ¿siempre caminas tan lento? Andando mujer. Llegaremos tarde⸺ Insistía Yerim mientras yo daba mis esfuerzos sobrehumanos para poder subir las escaleras un lunes por la mañana.

⸺Jisoo, con calma, ¿si? Es lunes, son las 8 a.m. El curso apenas comienza. Lo menos que quiero en este momento es correr⸺ Dije de mala gana.

⸺¡Oh, vamos! No querrás llegar tarde tu primer día⸺ Dijo comenzando a correr, dejándome hablando sola.

⸺Hey, Jisoo. ¡Jisoo! ¡Jisoo, esperame!

Salí corriendo detrás de ella, puesto que era mi primer día en esta escuela y ella era la única persona a quien conocía. No me di cuenta cuando doblando en una curva, sentí mi cuerpo impactar con el de alguien más y ambas caímos al piso. Intentaba reaccionar pero no podía del todo, aun me sentía algo mareada.

⸺Oye, oye amiga, ¿te encuentras bien?⸺ Escuchaba una voz a lo lejos. ⸺Demonios, chica, ¡reacciona!

Unos segundos después, cuando pude recuperarme, los vi. Vi los ojos más hermosos que haya visto en mi vida. Eran de un color café chocolate y tenían un brillo único. Me detuve a analizar el rostro de aquella chica con la que había tropezado y entonces lo supe, ¿jamas les ha pasado que ven a alguien a quien nunca antes han visto y con un simple intercambio de miradas, sabes lo cuan importante esa persona será para ti? ¡Já! Ni a mi. Solo había leído de ello. Pero ese día todo cambió. Desde ese día lo supe.

(presente)

⸺Bien, Hyunnie, sabes que puedes llamarme cuando quieras y te responderé, así sean las 3 de la madrugada. Te preparé tu comida favorita anoche, ojalá te guste. También te deje sobre la mesa un par de revistas con unos vestidos de novia que . . . ⸺Si, de nuevo no la dejé acabar.

⸺Cielos, Kang Seulgi, en serio tenemos que trabajar en tus ataques de ansiedad. Y de cuanto a asuntos de la boda, quiero atenderlos contigo, ¿ esta bien? Esperaré a que regreses para que nos encarguemos de ellos las dos⸺ Le sonreí, enredando mis manos en su cabello y acercando mis labios a los suyos. Cielos, aun no se va y ya la extraño.

⸺Esta bien, estoy de acuerdo. Cuando regrese planearemos todo con detenimiento, te lo prometo, amor⸺

Pasajeros del vuelo 147 con destino a Nueva York, favor de abordar por la puerta 2.

Ahí estaba su vuelo siendo anunciado. Aun no puedo creer que se va. Se que le irá de maravilla pero, pasa algo, hay algo en mi interior que no quiere que se vaya por muy emocionante que parezca.

⸺Te amo⸺ Dijo besando mis labios por ultima vez y tomando sus maletas.

⸺Yo te amo más, Seul⸺ Respondí dándole la mejor sonrisa que pude fingir en aquel momento.

⸺Te llamo en cuanto este en el hotel, linda.

⸺Te estaré esperando.

La vi caminar llena de emoción hacia la puerta. En ese momento solo ansiaba su regreso. Quería empezar con los preparativos de la boda, NUESTRA BODA, ya mismo. Pero era obvio, no lo haría sin ella.

Justo al final del túnel, antes de entrar al avión, Seulgi se volvió hacia mi con los ojos un poco humedecidos y un claro "te extrañaré" en el rostro. Levantó su mano dándome la ultima despedida.

Debí ir con ella. Debí correr hacia ella evadiendo cada guardia de seguridad que se me cruzara. Debí llegar a abrazarla y besarla. Besarla de una manera que ella jamas olvidaría y decirle una y otra vez al oído lo mucho que la amo, lo mucho que me importa. Debí cometer alguna locura de esas que se cometen solo por amor. Porque tal vez de eso se trata, creo que todos somos curiosos y nos gustaría saber hasta dónde somos capaces de llegar por amor. Pero muchas no lo hacemos, no porque no queramos, sino que para mostrarlo todo, todo nuestro amor se tiene que poner a prueba.

Debí, pero no lo hice. Finalmente, ¿cómo iba a saberlo? Nadie podría nunca decirme, nadie podría nunca haberme advertido que esa sería la ultima vez que la vería.