En Silencio Con Lo Que Callo || Construyendo Reflexiones

No te quejes

Acéptalo o busca una solución.

Son muchas las situaciones en las que la gente no deja de quejarse pero tampoco hacen nada por cambiarlo. Me viene ahora mismo una a la cabeza, justo una que viví en las elecciones de donde vivo hace apenas unas semanas.

Todo el mundo se quejaba de la persona que gobernaba. Llegan las votaciones. La persona vuelve a salir y lo mejor de todo es que arrasa con casi una mayoría absoluta. Ahora después de las elecciones la gente (que reconoce haberla votado) sigue quejándose de ella. Con razón los de alrededores desde hace años nos denominan  como "el pueblo de los tontos", cada vez le veo más sentido.

¿Que pasa en mi pueblo? O más bien, ¿que pasa en la sociedad? Solo era un pequeño ejemplo pero podría aplicarlo a muchas situaciones más.

Desde mi corta edad, por lo que veo es que vivimos en una sociedad donde nos encanta quejarnos, casi que lo hacemos inconscientemente, creo que lo tenemos muy normalizado. Quejarse es la moda, pero sin hacer nada para solucionarlo. Eso es lo que más gracia me hace de la situación.

Me parece una pena. Me entristece ver y vivir rodeada de gente la cual lamentarse y reclamar mejoras sobre algo es lo habitual junto a su conformismo de quedarse mirando. ¿En algún momento despertara esta sociedad y la gente se pondrá manos a la obra para mejorar los desastres?

A mi me encanta quejarme, sobre todo de mí misma, pero también hago algo para remediarlo. Por eso, quiero dar dos opciones para mejorar un poco tu actitud ante la queja y que no sé quede solo en eso.

La primera opción es aceptarlo. Cuando tienes algo que te atormenta pero no tienes tiempo ni forma para cambiarlo, la aceptación es la mejor opción que tienes. Aceptar lo que sucede y aprender a convivir con ello, intentando que afecte a tu vida lo menos posible. Reconozco que está aceptación puede llevar bastante tiempo (días, semanas o, incluso, meses) pero créanme cuando digo que una vez que lo consigues vives de una forma mucho más tranquila.

La segunda, y última, de las opciones supongo que ya sabes cuál es. Busca una solución. No tiene que ser una gran idea, ni algo complicadísimo, simplemente algo con lo que puedas dar en el clavo y resolver el problema que tienes. Muchas veces estás ideas vienen cuando menos te lo esperas, justo cuando no estás pensando en ello. Pero lo mejor de buscar soluciones no es solo encontrarlas, sino ponerte manos a la obra para luchar por solventar la complicación y conseguirlo. Por favor, que no se te ocurra algo y sigas sin hacer nada (y menos por el que dirán).

Quejarse es muy fácil, te propongo un reto: la próxima vez que te quejes, analizalo, acéptalo o busca soluciones. No hagas que tú queja se quede ahí, ¡vencela!