Salir de la zona de confort

20 13 2
                                    

¿Cuántas veces te has quedado con las ganas de hacer algo solo porque "no iba a ser lo tuyo"?

Aunque no te conozca creo saber la respuesta. Son muchas las veces, ¿verdad? No te culpes, nos pasa a todos.

Es momento de ponerle solución y arriesgar un poco más en este juego de la vida porque cuando seamos "eliminados" son las ganas en ver de las experiencias las que se vayan con nosotros si no lo hacemos.

La zona de confort es un estado psicológico en el que una persona se siente tranquila y segura, sin miedos ni ansiedad. En esa etapa mantenemos una misma rutina, no asumimos nuevos retos y, por lo tanto, nuestro desarrollo personal se estanca.

Cuando desde el exterior no se te proponen nuevos retos es más que normal permanecer en esta zona, nos sentimos agusto y no nos damos cuenta de la importancia que tiene que seamos nosotros mismos los que busquemos estás nuevas metas u objetivos.

Hay muchas personas que quizás se pregunten: y si estoy en una etapa de mi vida tranquila, ¿que necesidad tengo de buscar situaciones de ansiedad o miedo?
Yo te lo explico.

Cuando estamos mucho tiempo sin salir de nuestra zona de confort nos acabamos encontrando en una situación en la que no avanzamos, esto nos creará una sensación de frustración que afectará de manera muy negativa en la autoestima.

Algunos de los motivos (y ventajas) por los que debes salir de tu zona de confort son, por ejemplo, la motivación de crecimiento personal, nos ayuda a ganar resistencia y fortaleza para hacer frente a situaciones en las que no podemos cambiar, adquirimos hábitos más saludables a nivel físico y mental, proporciona nuevas perspectivas de la vida a nivel social y cultural, nos hace tolerar la frustración más fácilmente, ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, y mejora nuestra autoestima al haber superado miedos e inseguridades.
Estos son todos ejemplos pero seguro que según vayas saliendo de tu zona encontrarás un montón de ventajas más.

Algunas cosas que puedes hacer para comenzar la salida de tu lugar seguro son: proponte pequeños retos que puedas conseguir en un día o en poco tiempo, esto hará crecer tu motivación y hará que te sientas mejor contigo, realiza actividades con las que nunca te has atrevido, como aprender un idioma, viajar solo o apuntarte a una actividad deportiva diferente o habla con gente desconocida, ya que muchas veces salir de la zona de confort está relacionado con los problemas que tenemos a la hora de socializar, y entablando conversaciones con personas que no conocemos nos ayudará a superarlo.

En conclusión, anímate, sal de tu zona de confort, conoce a nueva gente y vive experiencias nuevas. Seguro que no te arrepientes, obtendrás un montón de beneficios y te sentirás mucho mejor contigo mismo.

En Silencio Con Lo Que Callo || Construyendo ReflexionesWhere stories live. Discover now