Trillizos┊Jaesung

25

— ¿Hablar? — repite Jaemin mientras lo observa con detenimiento, recorre disimuladamente su cuerpo y después finge desinterés por él.

Jaeyoon se sonroja cuando nota la mirada de Jisung posarse en la decoración de la casa, las rosas y las velas.

Oh, se siente tan avergonzado porque en realidad sólo quería charlar.

— Joven Park, pase, está en su casa. — le dice Jaehyun al muchacho de cabellos naranjas, él asiente y termina por entrar a la enorme residencia.

— Gracias, profesor Jaehyun.

Jaeyoon se asegura de acomodarse bien el saco tan costoso que compró, después de todo lo hizo para verse bien ante los ojos de su crush.

— Jisung, siéntate y cuéntanos eso tan importante que tienes por decir. — expresó el CEO con seriedad, se cruzó de brazos y le miró esperando su respuesta.

— Es que... Yo, bueno...

Los tres hermanos tenían la mirada puesta sobre Jisung, únicamente lo ponían más nervioso y quería huir ya mismo.

— Sunggie, sabes que puedes tenernos confianza. — exclamó el rosáceo con preocupación mientras se sentaba al otro extremo del sofá. — No le diremos a nadie, puedes estar tranquilo.

— Eso es cierto, Joven Park. Cualquier problema que usted tenga, no dude en que mis hermanos y yo daríamos todo por ayudarle.

— Yah, Jaeyoon. No lo toques tanto. — comenta
Jaehyun chasqueando su lengua, Jaeyoon se ríe y se pega como lapa a Jisung. — ¿Ves, bomboncito? No soy el único que tropezó en el pavimento por tus ojitos, mis hermanos feos también. — lloriquea el rosáceo sin querer apartarse del cómodo hombro del chico.

— ¿Feos? Tenemos el mismo rostro, ¿si recuerdas eso, cierto?

Jisung muerde su labio con fuerza, el nerviosismo lo está consumiendo y el silencio de Jaemin sólo lo empeora.

Bien, ya comprobó que los dos hermanos están interesados en él.

Eso es un problema, nunca interferiría en una hermandad y menos jugaría con ellos.

— Jaemin, ¿tú qué opinas? — le cuestionó Jaehyun obteniendo la atención de su hermano mayor.

Por favor, no digas nada hiriente. Pensó Jisung.

El pelinegro se aclaró la voz antes de hablar y dio un paso al frente.

— Jisung, es claro que tú me atraes. Quiero decir, tienes cualidades que de cierta forma me hacen interesarme en ti.

El pelinaranja le miró con duda.

— Pero no creo que tú y yo podamos ser compatibles en algo, no soy el prototipo de novio que esperas y yo no deseo serlo. — concluyó con la misma seriedad que antes, Jisung asintió y le dedicó una adorable sonrisa.

— Entiendo, Jaemin. Gracias por decírmelo.

— ¿De verdad? Creí que te enfadarías y me lanzarías algo. — le cuestionó confundido, Jisung negó sin borrar su sonrisa.

— ¡Yo puedo hacerlo! Ganas no me faltan de sumirle la mollera. — protestó Jaeyoon fingiendo levantarse del sofá para encarar a su hermano mayor, Jaemin sólo avanza un paso y el rosáceo se retracta regresando al sofá intimidado por el contrario.

— No soy el tipo de chico que llora porque alguien lo rechazó, eso es muy ridículo.

Jaehyun se ríe cuando escucha las palabras de su alumno, observa el rostro de su hermano y puede darse cuenta de que probablemente le hirió el ego a Jaemin.

— Bien por ti. Si me disculpan, tengo serios asuntos que atender acerca de la empresa.

Jaemin se retira no sin antes echarle un último vistazo a las manos de Jaeyoon tocando el suave rostro de Jisung, exhala enfadado y procede a subir las escaleras con rapidez.

— De verdad lo lamento, no quería causar problemas pero yo no estaba dispuesto a hacerles daño de alguna forma.

— Joven Park, ¿puedo tutearle? — le preguntó el joven de gafas con timidez, el de ojos chocolate asintió.

— Claro que sí, profesor.

— ¿Me permites obtener tu corazón?

Jisung sintió sus mejillas calientes de nuevo, ¿cómo es que no se desmayaba ante estos dos hombres?

— ¡Yah, Jaehyun! Yo quería preguntárselo primero. — expresó el menor de los trillizos lanzándole uno de los cojines del sofá al profesor.

— Jisung, lo último que deseamos es incomodarte. — le dijo Jaehyun al pelinaranja que intentaba tapar con sus manos sus mejillas, Jaeyoon lo observa con sus ojitos brillosos. — Así que se me ha ocurrido que cada uno hará su intento limpiamente de jugársela por obtener el privilegio de salir contigo, ¿eso te parece correcto?

— ¿Cortejarme?

El chiquillo de ojos chocolate soltó una risa que terminó por acelerar los corazones de ambos hermanos.

— Si nos puedes brindar una oportunidad, creéme que lo haremos sin pelear y a quien sea que decidas, estará bien.

— Está bien, yo acepto. — asiente tímidamente, el rosáceo quiere besarle las mejillas pero se contiene de hacerlo si no quiere tener un manotazo del bonito chico.

— ¡Hey! ¡Jaehyun tendrá ventaja! Yo no sé nada del romanticismo y él sí, ¡sabe poesía!

Jaehyun niega frenéticamente, ha sido exhibido por el tonto de su hermano.

— No es cierto, lo que te diga es falso.

Jisung se tapa el rostro mientras se ríe con ganas, ¿en serio le atraían estos dos? Vaya que sí.

[...]

yo digo q actualizaré seguido y me desaparezco, soy el verdadero: todas las mujeres mienten