13. the bad man

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NARRA JESSICA JONES.

Después de pasar un día de chicas e ir de compras y esas cosas fue hora de regresar a casa. Kendall se había ido desde el almuerzo por lo que me había dado el tiempo de pensar libremente y comentar todo lo que estaba pasando con mis amigas.

Me aconsejaron como siempre y finalmente me dejaron en mi casa. Abrí la puerta con una notable felicidad, pasar tiempo con mis amigas era algo que yo siempre agradecía.

Al cruzar la puerta vi a Jackson bajando de las escaleras. Tenía un notable ceño fruncido y cuando me vio una sonrisa sarcástica por lo que entendí se pinto en sus labios.

-¡Hasta que la princesa se digno a llegar!
-alzó sus brazos al aire.

-¿Que ocurre? -pregunte algo confundida.
El río sarcástico y se acercó a pasos apurados a mi.

No iba a mentir, me asustó. La vena de su cuello resaltaba y tenía una mirada muy diferente mientras que su respiración era muy descontrolada..

-Jessica, ¿crees que no tengo cosas que hacer? Perdí 2 juntas importantes por quedarme aquí con tu hijo. -parecía estar reprochandolo en mi cara.

-N-no entiendo. Tu dijiste que podías recoger a Miles hoy, incluso dijiste que pasarían la tarde con tus padres -explique.

-Jessica, ¿donde está tu jodido celular, eh?
-se cruzó de brazos. -Llame millones de veces, la escuela me llamó diciendo que Kendall no lo pasó a recoger y tu no contestabas el celular

-N-no t-tengo- -me intimidaba, no iba a mentirles.

-¿Sabes que? Solo olvídalo -se dio la media vuelta y lo perdí se mi visión.

Tenía un nudo en mi garganta, jamás me había hablado de esa forma. Me sentía incluso peor de lo que me sentía cuando peleaba con Kendall.

Subi a mi habitación y lo vi en el balcón fumando lo que parecía ser un cigarro electrónico, o un vape. Y estaba teniendo un deja vú.

Salí y me cruce de brazos frente a el, también note que tenia un vaso de ron. Y una mirada fría hacia mi. —Hey...

—Que excusa tienes ahora —relamio sus labios y me dio todaa su atención.

—Olvide mi celular y salí con las chicas.
—cai sentada en el pequeño sofá de ahí.
—Yo tenía en cuenta que pasarían la tarde con tus padres, por eso no me preocupe

El suspiro, al parecer trago su orgullo y se arrodillo frente a mí tomando mis manos.
—Solo avísame, amor. —su mirada había cambiado y ahora mordía su labio y pasaba su mano por mi muslo que estaba destapado por la falda que llevaba.

—Jackson, no quiero que esta sea la forma de arreglar nuestros problemas —desvie mi rostro cuando intento besarme.

—Jessi, quiero tenerte ahora —tomó mi cuello y me hizo besarlo.

—Jackson, no. —me puse de pie y el me miró indiferente. —Tengo cosas que hacer, podemos hacerlo luego. —dije sin dejarlo decir nada me metí a la habitación y me dispuse a arreglarme

La cena con Dua aun seguía en pie.

—¿A dónde vas? —me pregunto, el estaba en la sala bebiendo una cerveza con la vista fija en la tv.

—Me invitaron a cenar —dije. —Te veo luego, Jackson.

El se paró y antes de que pudiera salir de la casa tomo mi brazo inmovilizandome. Jadee de dolor, me estaba lastimando el agarre en mi brazo.

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