Capitulo 42

499 40 8
                                    

No pude levantar la mirada en ningún momento, David seguía parado en frente de mi esperando que tuviera la osadia de comenzar a hablar, pero no pude.

Era algo mio, mi secreto el que no quería que se enterara, si hable con Mica fue para que me entendiera un poco de las cosas por lo que ella había pasado, pero no quería contarse a alguien más, por vergüenza, por miedo o por lo que ustedes crean que sea.

Fue dificil asimilar lo que paso, noches, años de tener pesadillas y no contarse a nadie me mato un poco si, porque apesar de todo en algún punto de mi vida quería que alguna persona me ayudara, una violacion, se siente bien decirlo en voz alta. Aunque sea una que estuviera a lado de mi, no quería que tenga pena al contrario solo quería que se sentará y me escuchara.

Y ahora tenía esa oportunidad.

Alce mi vista encontrándome con unos ojos azules, esa mirada me lo decía todo, angustia, tristeza y algo más que no pude ver, pues no solo me paso a mi, sino también a su novia, lo poco que se es que su relación es estable y hermosa de paso.

—Podrías..mm..¿sentarte?.—hablar de esto me ponía mal, iso lo que pedí

Nos encontrábamos solos, ya que Dave salió con su hermana, escuchaba unos murmullos salir de la sala, jugué con mis manos en mi regazo. No quería moverme de donde estaba porque sabría lo que me paso a noche.

—Estoy aquí Elisabeth, puedo asegurarte que todo lo que me digas no saldrá de aquí...pero quiero saber todo, absolutamente todo.—Con el cariño que oí en su voz, me animo a contarselo.

Eso aria.

Era hora de dejar el pasado.

—Ocurrió hace unos años.—comienzo.—Sucedió en una de las carreras que tuvimos, la noche en que salí sola cuando en medio de la lluvia Bladimir comenzó a pelear con el chico por ser un patán conmigo ¿Te acuerdas?.

Asintió, escuchando atento cada palabra que decía.

—Salí sola del lugar porque ya era hora de regresar a casa, ya estaba a unas cuadras de casa.—respire profundo para continuar, mis ojos querían derramar lágrimas—Cerca de llegar a la casa ahí un camino que me asía llegar más rápido, decidí pasar por el lugar casi nunca pasaba nada, era oscuro si pero no era nada peligroso.

O eso pensaba yo.

—El motor empezo a fallar, busque alguien que me ayude, pero nadie transitaba por el lugar, busque mi teléfono estaba con 5 por siento de batería, apenas le prendí se apago.

En ese entonces tenia un celular medio viejito, cuando llegaba a 5 por siento se apagaba automáticamente.

—Espere un rato para que el motor se enfríe y después prenderlo, pero eso no sucedió, en medio de eso empezó a llover ya no podía quedarme más tiempo, ya que en aquel tiempo tenía hora de llegada y ustedes bien lo sabian.—asiente acercándose un poco —baje...baje para ver que paso.

Muy mala idea, pero que podía hacer si vivía por vivir, y en ese momento no pensé en lo que podía pasar.

En mi garganta se va instalando un nudo.

—Fue la peor decisión que tome,—apenas murmuró— cuando ya estaba fuera, nada más que la lluvia y algunos ladridos de perros se escuchaba—entre ellos eran aullidos.—No vi nada fuera de lo normal, pase como diez minutos yendo y viendo dentro del carro.

Buscado las herramientas que necesitaba.

—De pronto aparecieron 3 sombras por detrás, me voltee lo más rápido que pude, queriendo ver su cara pero nada pude ver, llevaban mascaras.

Estrella AzulWhere stories live. Discover now