Mi Primera Vez

Capítulo 10 ♡

-¿Bueno y entonces qué pasó? -Estamos sentadas en la cafetería y Olivia me mira con sus ojos expectantes.

-¿Qué pasó, de qué?

-Ayyy Em, no te hagas. Cuéntame en qué terminó todo anoche con Paul, sino soy capaz de ir a buscarlo y preguntarle por mi cuenta.

-Eso no lo dudo.

-No lo dudes. -Sonrió traviesa.

-Eres lo peor.

-Soy lo mejor y por eso me amas.

-Eres... insufrible. -Puse los ojos en blanco y recosté mi cara en la mesa. Sabía que debía contarle lo que había pasado pero no tenía claro por dónde empezar.

-Dale Em, me tienes en ascuas.

-Ufff que intensa. Está bien. -Olivia sonrió satisfecha y se acomodó en su silla.

-Todo pasó muy rápido y muy lento a la vez, no estoy muy segura; La cuestión es que Paul y yo empezamos a hablar de todo y nada, de nuestras vidas, de nuestra infancia, de nuestros sueños a futuro...

-Ohhh eso suena comprometedor. -Olivia interrumpió.

-Déjame seguir sino, no te lo cuento.

-Vale, perdona. -E hizo el gesto de sellar sus labios.

-...Y poco a poco nos fuimos adentrando en temas más íntimos.

-¿Cómo de íntimos?

-¡OLIVIA!

-Vale, perdona. Pero es que no avanzas...

-No me dejas.

-Ya no hablo más.

-Íntimos como nuestras últimas relaciones y eso. Yo le conté que nunca había tenido novio y él me miró con mucha curiosidad pero no me preguntó nada, solo me dijo que él sí había tenido un par, pero que en este momento estaba soltero... y así seguimos un rato tonteando sobre cosas banales como nuestros gustos musicales, culinarios, dónde nos gustaría viajar, trabajar, etc., hasta que le dije que ya era hora de irme a dormir. Él me dijo que por supuesto y me acompañó hasta la puerta de mi residencia, y ahí Oli, sentí que tuvo la intención de besarme pero algo lo detuvo, no sé... así que me dió un beso en la mejilla y tras un "buenas noches Em", desapareció en la oscuridad de la noche.

-Puedo preguntar qué hora era?

-Las 12:00 am

-Uyyy mi Cinderella.

-No seas boba.

-Jajaja, lo siento, era inevitable. Pero por lo que me dices, percibo que le gustas Em, solo que no la quiere embarrar contigo.

-¿Tú crees?

-Se supone que tú eres la psicóloga, no yo...

-Jajaja no seas boba. Tengo la cabeza hecha un lío y lo mío no es autoanalizarme.

-Yo creo que sí. Solo debes darle tiempo y tener calma.

-Justo lo que no tengo. -Sonreí.

-

El día transcurrió normal, como cualquier otro sábado en Cambridge lejos de mi familia y extrañándola un montón... Sin ella los días se me hacía más largos, me hacía muchas falta pasar tiempo con mi mamá y cocinar algo para mis hermanos, pelear con Zack y tenerle que dar la razón en busca de la paz en el hogar, cantarle a Lila o leerle antes de irnos a dormir, y como no, ser la niña consentida de papá así pasaran los años. Era imposible no extrañarlos con todas mis fuerzas, pero me repetía una y otra vez que lo que hacía era por mi y por el futuro que tanto había soñado desde pequeña y ellos estaban muy orgullosos. Mientras estaba inmersa en mi habitación en mis pensamientos mi celular vibró. Y al ver la pantalla , el corazón me dió un brinco: