Destino (Nana x Hachi)

Cambios

Nota del capítulo:
En el capítulo encontrarás una sección marcada con ":::::::::::" al inicio y final, ya que habrá contenido maduro que puede ser sensible para algunas personas. Puedes pasar de leer esta parte si no es de tu agrado ya que no afecta a la trama.

************
La revelación de la identidad de la compañera de Nana fue algo bastante inesperado, Hachi egoístamente pensó que estaba interesada en ella. Tal vez era alguna forma de involucrarse, no estaba segura. Más que sentirse celosa, estaba confundida, pero también estaba feliz de poder compartir el resto de la noche con Nana.

Nana estaba bastante cansada, su periodo tampoco ayudaba con ello así que después de bañarse fue directo a la cama. Haber suspendido las pastillas anticonceptivas le había provocado un desbalance hormonal, la ginecóloga le comentó que estaría así hasta que se regulara nuevamente. Estaba por quedarse dormida cuando escuchó vagamente que Hachi le hablaba.

- Me alegra que Shouji me engañara, soy muy feliz a tu lado.

Nana sonrió y se volteó hacia Hachi para abrazarla.

La chica sonrió juguetona, comenzó a acariciar su rostro y siguió por su espalda. A Nana le gustaba el tacto pero consideraba que no era el mejor momento, a pesar de ello, quería sentirla.

- Perdona, Hachi, me siento muy cansada. Me gusta pero ¿podríamos continuar mañana?

Hachi asintió desanimada. Se recostó a su lado y la abrazó. No quería pensar cosas equivocadas, ella nunca la había traicionado ni creía que lo estuviera haciendo ahora, aunque tal vez Layla estuviera enamorada de Nana y quisiera robársela, por algo la había reclutado a ese trabajo tan personal. También le inquietaba el hecho de que hubiera que cambiarse y pasar tanto tiempo juntas a solas. Haber visto a Shouji la tenía con los sentimientos de traición a flor de piel.

"Nana no me haría eso, solo está cansada."

Bastante inquieta se fue a dormir ya que tenía que trabajar al día siguiente, no sin abrazar fuertemente a Nana. No quería perderla, no a ella.

- Oye Nana... ¿estás despierta?
- No
- ¿Podrías cantarme? Hace mucho no lo haces...

Nana comenzó a improvisar una canción sobre el amor a primera vista.

———

Hachi se dio cuenta que se quedó dormida cuando sonó el despertador por la mañana. Nana se encontraba durmiendo plácidamente a su lado. Aún era bastante temprano, sin embargo, por el cansancio de la noche anterior no se habían bañado por la noche; se levantó rápido a preparar la tina, cocinó un desayuno fácil y se dirigió a despertar a la chica.

- Nana, despierta, ya está el baño listo. Además tengo una nueva idea para tu maquillaje.

La chica del cabello negro se dirigió hacia el baño, pero al ver la tina se sintió avergonzada con Hachi de la posibilidad de ensuciar con sangre. Pensó que su período regular era horrible y consideró volver a tomar los anticonceptivos. No recordaba que fuera algo tan problemático ya que comenzó a medicarse desde muy joven.
Hachi entró detrás de ella y se desvistió.

- Gracias por preparar el baño, pero hoy usaré la ducha.- dijo, metiéndose a esta.
- De acuerdo, entremos juntas.- se empujó detrás de ella.
- No.- Dijo con tono cortante mientras la sacaba de la regadera. No era el tono que quería usar, pero se sentía muy sensible. Cuando cerró el cancel se puso a llorar discretamente por haberle hablado de esa manera.

Hachi estaba muy confundida, no quería volver a pensar que estaba molesta con ella, pero esto no le dejaba opción. Seguro ahora Layla había intentado seducirla y claro, era una chica preciosa, si ella había caído, Nana tampoco sería capaz de resistirse.
Se metió sola en la tina y sollozó de manera casi inaudible. ¿O si podía escuchar su propio sollozo?