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Changbin aún estaba aturdido, los recuerdos aún vagaban en su mente, podía sentir la textura suave de la piel del omega entre sus dedos, la calidez del interior del Omega, su esencia

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Changbin aún estaba aturdido, los recuerdos aún vagaban en su mente, podía sentir la textura suave de la piel del omega entre sus dedos, la calidez del interior del Omega, su esencia.
Abrió los ojos y lo miró, miró la marca de reclamación que había en su nuca, ahora ese Omega era suyo en todos los aspectos. Ahora ya podría morir feliz.

Recordó el sueño que acababa de tener y no él no quería perder a tan hermoso y maravilloso Omega que tenía entre sus brazos por lo que casi por inercia abrazo aún más fuerte a Seungmin y juntó aún más sus cuerpos. Hace algunos minutos había salido del interior del Omega pero tenerlo tan cerca otra vez provocó que su miembro se pusiera duro nuevamente.

Seungmin por su parte estaba feliz pero preocupado ¿cómo se supone que le diría al alfa que tiene un hijo? Probablemente le reclame por no haberlo visto crecer o peor tal vez reclamara la tan pobre educación que estaba recibiendo su cachorro. Seungmin era un Omega fuerte y pocas veces se dejaba maltratar por alguien pero si se trataba de su cachorro el Omega sería el más frágil y sumiso del mundo. Todos sus pensamientos se disiparon cuando cierto alfa lo abrazó y acercó aún más sus cuerpos sintiendo así la enorme erección que tenía el alfa.

— Buenos días— habló el Omega algo mareado por las feromonas que esparcía el alfa.

— Mmm buenos días— respondió el alfa mientras restregaba su cara en el cuello del Omega— Déjame olerte, suelta feromonas— una voz profunda salió de Seo, en verdad necesitaba a su Omega.

Seungmin no dijo nada tan solo se relajó y comenzó a liberar feromonas las cuales ahora daban a relucir sus verdaderos sentimientos, a partir de ahora no podía mentir respecto a cómo se sentía. Si estaba preocupado hace tan solo un momento ese sentimiento se esfumó tan rápido como apareció.

Podía sentir a través de su enlace y la marca lo feliz que se sentía Seo, sentía el leve ronroneo que producía el lobo del alfa, eso y tener a su alfa al lado era lo que siempre quiso, tan solo faltaba su cachorro.
Ambos se dejaron envolver por los sentimientos y feromonas que inundaban la habitación, por lo que otra ronda fue inevitable.

Changbin comenzó a repartir besos por todo el cuello del Omega, bajó a su espalda dejando pequeñas marcas rojizas mientras acariciaba el estómago de Seungmin. Llevó su mano derecha hasta uno de sus muslos y lo acarició de arriba abajo sintiendo la suavidad de este, con su otra mano libre rodeo la cintura del Omega, giro su rostro para darle un beso, un beso profundo lleno de amor y posesión. Poco a poco comenzó a restregar su erección en el trasero del Omega sintiendo la humedad que comenzaba a salir y sin pensarlo llevó su mano que tenía en sus piernas hasta la entrada del Omega. Metió dos dedos en su mojada entrada, giró sus dedos dentro, recorrió con las yemas de sus dedos las paredes del omega hasta hallar su punto dulce. Seungmin soltó un gemido satisfactorio cuando éste recorría con sus dedos sus paredes, unos segundos bastaron para que el Omega temblará de placer y se corriera.

—Mm... hueles delicioso Min— dijo roncamente mientras mordía la oreja del Omega eróticamente.

Seungmin tenía la mente en blanco por el placer que no respondió tan solo se quedó quieto mientras sentía a Changbin salir. El alfa por su parte estaba mareado tanto por su celo como por las feromonas del Omega que sin querer dejó salir totalmente la esencia de sus feromonas. Seo llevó sus dedos cubiertos de humedad a su boca y los chupo gustoso sin dejar de restregar su miembro en las nalgas del Omega.

Solo una noche (ChangMin) [✓]Where stories live. Discover now