Lastima o no

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Jiang Cheng al ver que Liu Qingge se entro a bañar salio para bañarse en el otro baño, si no se bañaba ahora, seguro despues el agua estaria mas fría y Jiang Cheng ya no quería bañarse con agua helada.

Salio rapidamente y fue a bañarse, y solo se dio cuenta cuando estuvo en bata, que no habia traído su ropa para cambiarse.

- Pero la puta - maldijo y espió por el pasillo temblando. Ya el sol estaba bajando y hacia mas frio

Jiang Cheng soltó un quejido saltando en el lugar para calmar el frío hasta que su vista se poso en el armario de Liu Qingge y una idea se le cayo en la cabeza. Sin dudarlo abrió el armario y busco una remera para ponerse.

Encontrando una remera mangas largas se la puso y utilizo unas pantublas para no ir descalzo a la otra habitación y buscar su parte inferior de ropa.

Aun así se enfrio un poco y se apresuro a buscar entre los cajones para ponerse sus boxers y unas medias.

- Tardo demasiado ¿No cree General?- quejo mientras se terminaba de poner sus medias al escuchar la puerta del baño. Un Liu Qingge molesto salio y se sorprendió al ver al Jiang vistiendo su ropa.

-¿Por que tienes mi ropa?¿Te bañaste?

- Si, tardabas mucho y despues el agua es fria, entonces decidí ir a bañarme en el otro baño - dijo Jiang Cheng. - No lleve ropa para cambiarme y no queria salir así y enfriarme.

- Entonces te pusiste mi ropa - remarcó Liu Qingge cruzandose de brazos.

- Creo que no entendiste la emergencia, pero, si. Me puse su ropa General ¿Que?¿Querias que le pidiera su ropa al coronel?- pregunto Jiang Cheng

- No, esta bien, no deberías ponerte otra ropa que no sea la mía - dijo Liu Qingge.

Jiang Cheng blanqueo los ojos.

Jiang Cheng se seco el pelo con la toalla durante unos minutos hasta que se encontró con los ojos de Liu Qingge en un estado molesto y confuso que le llamo la atención

- ¿Que pasa?

- Tu... ¿No me sigues seduciendo, verdad?- cuestiono Liu Qingge mirándolo. Si de por sí, Jiang Cheng era encantador, verlo así con el pelo mojado vistiendo  con una remera suya que tenia la intención de llegarle a la rodilla y sin ningún pantalón, era aun mas tentador.

"....."

- Ay por Dios, que enfermo eres - dijo Jiang Cheng dándose cuenta de sus pensamientos - ¿Acaso verme a si te prende?

Liu Qingge era demasiado orgulloso para decírselo mirandole a la cara, pero también demasiado honesto para negarlo, así que evito su mirada y respondió -... Quizas.

- ¿Quizas?¿Eso es un si o un no?- reclamo Jiang Cheng.

- ¿Entonces esperas que me quede tranquilo con tu aspecto?- cuestiono Liu Qingge.

- Y si. O sea, es una ropa de lo mas normal - remarcó el Jiang mirándolo.

- No es normal, te queda mucho mejor que a mí - dijo Liu Qingge.

- Entiendo, entonces el problema es que soy muy ardiente y todo me luce mejor - insinuo Jiang Cheng, intentando avergonzarlo

- Si, es eso, me exitas demasiado - respondió Liu Qingge con simpleza. Jiang Cheng por otro lado sintió que el calor abrazo su cuerpo.

-¡Descarado!- exclamó Jiang Cheng y le tiro su toalla. El avergonzado termino siendo otro.

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Liu Qingge lo dejo y Jiang Cheng siguió leyendo sobre su familia. Habia una cosa que los tenia preocupado y Liu Qingge pudo notarlo cuando regreso en la noche.

Las cartas del GeneralKde žijí příběhy. Začni objevovat