capítulo 1

873 47 4
                                    

                                                                                                ♡꙳⭑

Hoy era un día bastante movido, ya que tenía que preparar la maleta lo antes posible, no quería perder el AVE.

Os pongo en contexto, me llamo Mía, soy de Cádiz, concretamente de Jeréz, pero estoy cursando mi último año de carrera en Madrid, estudio educación primaria, ya que siempre me ha gustado esa rama de la educación y además el hecho de enseñarle a niños pequeños.

La universidad ha terminado durante un tiempo, ya que estamos en Navidad, así que decidí un día antes de las vacaciones que sería buena idea visitar a mi familia, ya que hacía más de cuatro meses que no iba a visitarlos, vosotros diréis... ¿Por qué vas a Málaga? Sencillo, mis padres, al yo y mi hermano pequeño independizarnos decidieron que sería buena idea mudarse a Fuengirola, ya que desde siempre les ha gustado esta ciudad.

Mis padres son los mejores del mundo, siempre me han dejado hacer lo que yo quisiera en términos de estudios y me puedo sentir orgullosa de que casi siempre he tenido lo que pedía, por lo cual, son los mejores. Aunque en términos de relaciones son un poco bastante especiales... Pero ya llegaremos a eso.

Cómo iba a lo justo, tuve que meter toda mi ropa que estaba amontonada en el suelo del piso que alquilaba, la intenté cerrar a presión y me fui corriendo.
Me fui a pie ya que no tenía ganas de coger el coche, aparte, conducir tanto y sola es muy peligroso.

***

Cuando llegué a la estación espere durante dos minutos hasta que se abrieran las puertas, cuando estás se abrieron no me pude creer la cantidad de gente que entraba a la par mía, además del increíble número de personas ya dentro del vehículo, así que intenté buscar un asiento lejos del bullicio de la gente.

Para mi sorpresa, todos o casi todos los asientos estaban pillados y cada vez el montón de gente se hacía más notable, de reojo pude observar cómo al fondo del AVE se encontraba un chaval que más o menos tendría mi edad, estaba jugando a algo en... ¿La Switch?

Me acerqué para saber si estaba con alguien, y cuando lo tuve lo suficientemente cerca como para distinguirlo, no me lo pude creer.

Era Illojuan, intenté calmarme internamente, cosa complicada, pero aún así me decidí a preguntarle si su sitio estaba ocupado aunque no había nadie a su lado.

-Disculpa, ¿no te importa que me siente aquí? -Pregunté con voz temblorosa, ya que era obvio que enfrente se encontraba ese chico andaluz divertido que alegraba todos mis días con sus directos, intenté que mi yo interior se calmara para poder tener una conversación normal con él. -Es que hay bastante gente y no he encontrado ningún otro sitio libre...

Me observó con una sonrisa, esa sonrisa que observaba todos o casi todos los días que podía tener un ratito de tiempo libre.

-No, no... No te preocupes, te puedes sentar. Además, me harías compañía, desde Madrid hasta Málaga son un par de horitas así que no estaría mal. -Su andaluz marcado se acentuó al hablarme, lo que provocó que mis piernas temblaran al encontrarme a su lado.

-Pero de verás, no te quiero incordiar... Si quieres me puedo buscar otro sitio o estar de pie.

-Que no chiquilla, no me importa, de verda'. -Me invitó con su mano a sentarme, yo le sonreí y me dispuse a colocarme al lado de la ventana, ya que él se encontraba al lado del pasillo. Mi cerebro todavía no podía procesar que estaba al lado de él.

Al principio no nos mirábamos, estábamos un poco incómodos, así que, para romper el hielo, Juan empezó la conversación.

-Y... bueno, ¿Cómo te llamas? -Me miró a los ojos, haciendo que me pusiera aún más nerviosa de lo que ya estaba.

-Mia, ¿y tú?

-Es un nombre muy bonito, yo... creo que me conoce', no es por ser un engreído ni nada, es solo que no hay que ser un científico para ver que tienes una foto mía en la funda de tu móvil. -Miré mi funda, y efectivamente había una foto pequeña recortada con un borde blanco de Juan con unas gafas de sol en una discoteca, famosa foto. Solté una risa nerviosa queriendo esconderme en cualquier lugar.

-Bueno, es que no quería sacar mi lado fan cuando no estás trabajando, aunque no es que trabajes mucho. -Dije entre risas, creando un ambiente más acogedor, él acompañó mi risa con la suya y pronto me sentí más cómoda con él.

Me encanta porque en ese momento pensaba que tenía que disfrutar ya que solamente lo vería una vez, sin saber que tarde o temprano estos encontronazos serían diarios.

No me molesta, es má', te agradezco que me siga', sin mis fans al final no soy na'. -Le sonreí con mis mejillas coloradas, ya que sí, soy esas típicas chicas que se sonrojan por todo. -Pero bueno chavala, no hace falta que estés roja siempre.

-Ay Juanito... Digo, Juan... Cómo se nota que no eres tú el que está gritando internamente.

-No creo que sea para tanto... Puedes estar tranquila que no muerdo. -Bromeó, haciendo que soltara una risita. -Mmm... ya que estamos y vamos a pasar bastante tiempo juntos, ¿me podrías contar algo sobre tí?

-Suena tentador pero ¿Yo que gano a cambio? Yo también quiero conocerte.

-¿A mí? Pero si ya sabes más de mi vida tú, que mis padres. -Bromeó, haciendo que me fijase en sus ojos marrones oscuros con algunos destellos gracias al sol.

-Venga hombre, ¿tienes miedo de que después yo vaya divulgando información privada? -Le sonreí.

-Puede ser... No hombre, es coña, pregunta lo que quieras. Lo hacemos así, yo te pregunto una y luego tú otra. -Dijo, yo asentí sin poder creerme aún que estaba al lado suya. -¿De dónde eres?

-Pues... Soy de Cádiz, pero voy a Málaga para las vacaciones porque mis padres se mudaron. -Se sorprendió al decirle mi destino, el cual era el mismo que el suyo.

-¿A Málaga? ¿Me estás siguiendo? -Sonrió juguetón. He de admitir que me quedé en blanco durante una fracción de segundo, pero me recompuse.

                                                                                   ♡꙳⭑

mi perfecta casualidad »illojuanWhere stories live. Discover now