Profundas Miradas(II)

Capitulo Final.

Noto como mis piernas comienzan a temblar, mi corazón cada ves va más rápido y mi estomago parece un zoológico.

La gente nos mira, atentos, mientras nosotras observamos al jurado.
Que hablan animadamente con Pepe y los chicos.

Jesus me echa una mirada rápida, sonriente.

-Bueno, bueno.-comienza a hablar el presentador.- Parece que el resultado ha estado bastante claro para el jurado.
Han sabido perfectamente quien tenía que ganar.
Por técnica, por baile, por ser las mejores.-hace una pausa mientras abre el sobre.-Y las ganadoras son..

Le doy la mano a Mireia y la aprieto muy fuerte.
Siento que en cualquier momento me voy a desmayar, pero aguanto.

-Isabella Clarck y Mireia Martínez, de la academia de baile de los Ángeles, Life of dance, nuestra actual ganadora.

Abro mucho la boca y abrazo muy fuerte a Mireia.
No me lo creo.
Aun no.
Noto como las lagrimas comienzan a salir por mis ojos.
Y esta vez, son de alegría.

Vamos corriendo a por el trofeo y lo alzamos, mirando a nuestra academia.

-Ejem, ejem.-llevan el micrófono los gemelos.-¿Vais a venir a bailar con nosotros, no?

Miro a Mireia sonriente.

-¡Pues claro!-gritamos, tirándonos a abrazar a los gemelos.

Hace unos cuantos días me sentía agobiada,harta de todo,con demasiado sufrimiento y pocas fuerzas. Escalando una montaña de errores,mentiras, descuidos y mil cosas más que ahora intento no recordar. Intentaba escalar y llegar a una cima que a cada paso que daba se hacía mayor por más que escalase. Sentí qu el lugar se hacia más grande y yo mas pequeña por momentos. Pero en estas situaciones en las que minuto tras minuto solo escurren lágrimas por tus ojos,llegan unas personas que te dicen cualquier tonteria y te alegran el día. Tonterias sí,pero esas tonterias te demuestran que estan ahi siempre que lo necesites. Son tu salvacion en este momento de tu vida. Por ellos cogí mi mundo,lo levante de la miseria y lo cargue en mis espaldas para volverlo a situarlo en el lugar correcto: La felicidad.
Ahora, en estos instantes, se que de pasas una mala etapa, luego vendrá un oleaje de cosas buenas.
Cosas buenas que te cambiaran la vida por completo.
Porque un día te das cuenta que el tiempo ha pasado y sigues siendo la misma persona.
Frágil, con ganas de vivir, enamorada, tierna..
Sigues teniéndole miedo a las despedidas.
Y sigues sin saber si existen finales felices.
Sigues esperando y desesperándote.
Sigues indecisa, rara, como la primera vez que lo viste.
Y ahora, no te puedes creer que lo tengas delante, de nuevo, pero esta vez para siempre.
Después de todo este tiempo, sigue estando ahí.
A traspasado distancia, discusiones, malas rachas, pero eso, ha echo que nos demos cuenta de todo lo que hemos vivido juntos, y que, uno, sin el otro, no seriamos nada.
Lo tengo en frente, sonriéndome como la primera vez que me vio.
Bella, dulce bella.
Esas palabras fueron las primeras que me dirigió.
Y quien me iba a decir a mi, que un chico como él, acabaría enamorándome locamente.

Y yo no se si nuestro final será feliz, pero quiero que sea nuestro, de el y mío.
Y que si ese final, tiene que ser triste, sea porque la muerte ha querido.

Ahora se con toda la seguridad del mundo, que si es cierto eso que dicen.
Lo mejor esta por venir, si no te das por vencido.
Qué si no te rindes y tienes paciencia, las cosas llegan cuando menos te lo esperas.
Ahora sé, que por fin, la vida se portara bien conmigo.
Y que, podré vivirla, con las tres personas que mas quiero en mi vida.
Mi segunda familia.

Miro a los tres chicos que me sonríen tiernamente.
Y es que no hay nada más significativo que las profundas miradas de los cuatro.
Con las que conectamos.

-Os lo dije.-celebra Mireia.-Si el destino nos quería juntos, acabaría juntándonos.