Profundas Miradas(II)

Capitulo 19.

#Flascakc#
*Narrador en tercera persona*

Mireia conversa alegremente por Skype con su mejor amigo, Jesus.
Aunque haya pasado todo lo que ha pasado entre el y Bella, siguen siendo muy amigos.

-¿Cómo está.. ella?-se atreve a preguntar el chico.

-Genial.-ironiza Mire.-Aun no te veo capaz de haber elegido a la otra.

Jesus tensa la mandíbula y mira la pantalla.

-Yo ya no la quiero.-dice, serio.

-Ambos sabemos que es mentira.-le dice Mireia, poniendo mala cara.

-De todas formas. ¿Que importa eso?-alza la voz.-Es imposible que pudiéramos estar juntos.

-Jesus Oviedo dándose por vencido.-suspira Mireia.-Valla mejo, creía que vuestro lema era..

-Lo mejor esta por venir si no te das por vencido.-suspira Jesus.-Ya lose, pero es que..

Y no puede seguir porque Bella aparece por la puerta en enrollada en una toalla.
Viene de la piscina.

La chica, que aun no se ha enterado de que Jesus esta presente, se deshace de la toalla para dejar ver su bonita figura en bikini.

Jesus la observa atentamente unos minutos.
Observándola.

-Bella.-la llama Mire.-Estoy hablando con..

La chica se gira y ve de pleno a Jesus.
De repente todos los recuerdos junto a él aparecen por su mente, aumentando las ganas de llorar.

-Ah..-susurra.-Hola.

Jesus sigue mirándola, penetrante.
Serio, frío.
Porque con la mirada lo dice todo.
La desea.
La echa de menos.

-Ey.-se rasca este la nuca.-¿Como vas?

A la morena le sorprende mucho la pregunta.

-Como si te importara.-dice Bella seria, buscando algo en el armario.

-¿Sabes?-alza la voz Jesus.-Tienes razón, no me importa.
Y tampoco me importa lo que hagas con tu puta vida.-se levanta y le da una patada al sofá.-Y tampoco me importan todos los momentos que he pasado contigo.
¿Porque sabes?
¡Todo era mentira!

La boca de las dos chicas llegan hasta el suelo en esos momentos.

-Ya, de ti me lo podía imaginar.-susurra la chica.-¿O te recuerdo lo de la apuesta?-alza la voz.-¡Que persona mas falsa!

Jesus se queda mirando como la chica comienza a llorar de nuevo, yéndose de la habitación dando un portazo.

Jesus apaga rápidamente la cámara y se sienta en el sofá, ahogando las lagrima.

#Fin Flasbakh#

-Bella.- me mira mi mejor amiga.-Eres mas cabezota que Jesus.

-Y dale con el niño.-bufo.-Que dejes de nombrarlo en todas las conversaciones.
El ya es pasado.
Voy a cambiar de libro.

Mireia suelta una carcajada y me mira.

-Todos los libros son iguales para ti.-me toca la punta de la nariz.-Asique, vamos, ya te has tomado tus vacaciones veraniegas, ahora a ensayar el dueto, que en un mes no..

-Nos sale perfecto. -replico.

-Para el campeonato mundial no sirve solo perfecto.-apunta.-Recuerda que nos jugamos el título a las mejores bailarinas del mundo.

Resoplo mientras entro en el estudio.
No quiero bailar una canción de Jesus.
No puedo.

....

-Después de todo.-apaga la música Mireia.- Te sale mejor que antes.

-Quien baila bien, baila bien.-le saco la lengua a la chica.

-Voy al baño, ahora vengo.-me tira un beso.

Me siento en el suelo mirando la pantalla del movil.

Y de repente empieza a sonar.
Y en la pantalla aparece el nombre de Jesus.
Me pongo nerviosa.
Mucho.
Pero lo cojo.

-¿Hola?-digo, intentando aparentar tranquilidad.

-Eh.. Bella, soy... soy Dani, que mi movil estaba sin batería.-dice.

Si hombre va, me vas a decir a mi que no se le ocurre otra excusa.

-Ah... hola Dani.-le sigo la corriente.

-Quería saber como estabas.-suspira.-Osea, todo, tu vida, tu baile..

-Ah, me va muy bien.-me "río".

-¿Y con el tema de Jesus?-pregunta.

Ay Jesus, que quieres saber si aun te quiero.

-¿A que te refieres?-digo, sonriente.

¿Qué?
Jesus esta preocupándose por mi.
Después de todo lo que me dijo.

-A lo que te dijo...-se rasca la nuca.

Pero si ayer hable con Dani sobre esto.
Infórmate, Inútil.

-Pues ya te dije que me sentó como una patada en el culo.

-No lo dije en serio... dijo, dijo, no lo dijo enserio.-se pone nervioso.

-Ya claro.-me río irónicamente.-Nunca me ha querido.
Y las promesas que me hizo.
Ahí se quedaron, en México.

Quiero que lo diga.

-El si te quiere Bella, lo sabes.

Y lo ha dicho.

-Si si.-tenso la mandíbula.-Bueno, Jesus te dejo que tengo que ensayar.

-¿Jesus?-se pone nervioso.-Soy Dani, eh.

-¿Enserio te crees que después de tanto tiempo no se diferenciar tu voz de la de tu hermano?-digo, victoriosa.