A - 09

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Se encontraba en su habitación, San se había ofrecido a ayudar a su madre con las compras mientras el padre de Wooyoung estaba en su oficina ordenando unos papeles del trabajo. El menor decidió acomodar su ropa en la cama para poder entrar a bañarse pero le llegó una notificación de la app que tanto utilizaba últimamente. 

-¿Omegaverse? - Una de las escritoras que había decidido seguir, publicó un nuevo fanfic y en su descripción explicaba que se trataba de un omegaverse. 

"Comenzar a leer"

Al comenzar a leer, la curiosidad de aquel mundo ficticio que se había creado crecía con cada párrafo. Seres híbridos que tienen instintos animal pero a su vez pueden ser humanos, fascinante. Pero hubo un párrafo que le plantó una curiosidad que podía llegar a ser algo peligrosa. 

"Wooyoung estaba entrando en pánico, de pronto su lobo parecía desesperado buscando el origen del aroma que lo estaba enloqueciendo. El olor a mermelada de fresa lo guío hasta aquel parque que se encontraba doblando la esquina. 
-¿Wooyoung? - Llamó extrañado su pareja pero el nombrado no hizo caso, estaba en un trance.
Se dejó llevar por su olfato, cerro los ojos y se fue guiado por su lobo. Una vez estuvo a pocos pasos del dueño de aquel aroma, abrió los ojos. Y ahí estaba, un chico de cabello rosa sentado mientras leía un libro, tes pálida y homogénea, y aquel cuello limpio y preparado para recibir su marca; no pudo evitar relamerse. Constó de sólo dar unos pasos más para que el contrario pueda percibir su aroma y, finalmente, lo mirase. Al conectar miradas, el celo de ambos había explotado. Eso sólo significaba una cosa: había encontrado a su destinado. Lo último que recordaba eran los ojos profundos y llenos de deseo de aquel omega; luego, su lobo tomó el control." 

El sonido de unos golpes a la puerta lo sacaron de su estado de inmersión por la lectura. 

-¿Ya te cambiaste? - Preguntó Choi del otro lado. 

Wooyoung entró en un pequeño pánico y bloqueo el celular antes de tirarlo a la cama - N-no, aún no entré a bañarme - Tartamudeó. 

San, al escuchar eso, abrió la puerta. Seguía vestido como previamente estaba cuanto se fue a comprar con su madre, sólo que esta vez su camiseta estaba levemente corrida hacia un lado, dejando ver perfectamente la parte baja de su cuello y la clavícula que apenas se le marcaba. Aquel detalle no pasó desapercibida por el menor el cual, por un momento, se preguntó como se sentiría morderlo. 

-¿Irás a bañarte ahora? Porque quiero bañarme antes de cenar - Preguntó. 

-Mermelada de fresa - balbuceo el menor sin darse cuenta, aún con aquel párrafo dando vueltas en su cabeza. 

-¿Qué? 

-¿Qué? - Y ahí el menor se dio cuenta que aquel pensamiento que sonó en su mente, sus labios lo habían reproducido - Que... Tengo ganas de comer mermelada de fresa - Se rascó la nuca mientras reía por los nervios de haber sido descubierto. 

-Oh... - San dejo un momento de silencio, no sabía como responder a aquel comentario inesperado del menor de ambos - Podemos ir a comprar después, si quieres - Propuso algo confundido aún. 

- Esta bien... - Y un silencio incómodo se hizo presente en el cual ambos chicos miraban algún punto perdido de la habitación. 

No entres a wattpad - 🅢🅦Место, где живут истории. Откройте их для себя