― ¿Sus ojos? ―.
― Si. Todo cambió desde que los vi ―.
Quién diría que esas miradas evolucionarían a algo que nunca había sentido antes. Un sentimiento nuevo si...
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Días después, ChangBin se encontraba en su cuarto enfrascado en un trabajo de ciencias que debía entregar después del fin de semana, ¿Por qué lo hacían sufrir tanto? Tenían su segundo partido de la liga el domingo y debía adelantar. Pero apenas llevaba un trozo.
Unos toques en su puerta le hicieron girar la cabeza para encontrarse a su melliza.
― Esto... Binnie. Papá me ha dicho que te diga que cenará fuera, ya que sale tarde de la oficina. Mamá y yo saldremos a comprar mi vestido para el baile, así que te quedaras solo en casa con esta preciosura ― dijo mientras asomaba a su perrita.
― Vale... dile a mamá que me compre un traje a mi también. Ya sabes la talla ―.
― Ok, nos vemos más tarde ― dijo para irse. Pero ChangBin no se quedaría de brazos cruzados tras la conversación con uno de sus mejores amigos unos días antes. Le había estado molestando disimuladamente cada vez que tenía la ocasión. Y era gracioso ver a su amigo avergonzarse.
― Espera hermanita, quisiera preguntarte... ¿Vas al baile con alguien? ― ella quedó estática y asumió rápidamente que Chris no le había dicho nada. Giró con una sonrisa nerviosa y asintió.
― Voy con Christopher ―.
― Uy, ¿Y eso? Sé que sois amigos, pero ¿Por qué tan nerviosa? ¿Te gusta? ― ella se sonrojó y asintió otra vez y le cogió de las manos rápidamente.
― Solo te pido, te lo pido Bin, que no se lo digas. Es demasiado vergonzoso y él es un gran amigo ―.
Él la abrazó para empezar a reírse (aparte de gritar internamente porque su gran amigo sería su cuñado si o si tarde o temprano) ― Mi boca está sellada. Puedes ir en paz.
― Mira hija, este es bonito ― dijo su madre mostrándole un vestido turquesa que encontró a su lado.
― No me convence mamá. Aún hay más opciones, sigamos buscando ―.
― Vale, da una vuelta. Yo iré a coger el traje de tu hermano ―.
Una vez que se fue, HyeRim empezó a mirar confusa todos los vestidos. No sabía mucho, habían de muchos colores y tipos, no estaba convencida de cuál le quedaría mejor. El tono de llamada de su teléfono empezó a sonar. Era Chris.
[ ― Hola HyeRim, ¿Me puedes hacer un favorcito?] ― se le escuchó, con una risa de fondo.
― Claro Chris. ¿Qué necesitas? ―.
[ ― SoonYoung no me quiere pasar los deberes de matemáticas, así que busco un alma caritativa que me ayude. ¿Eres una de esas? ] ― HyeRim recordó que las matemáticas no eran el punto fuerte del chico.
Rio suavemente para decir ― Tranquilo, te los pasaré. Pero tendrá que ser mañana. Ahora mismo estoy buscando un vestido para el baile ― Se escuchó un golpe ― ¿Chris? ¿Qué fue eso?
[ ― Félix. Está conmigo y se ha caído al suelo ― se está riendo de mi porque se ha enterado que me gustas pero no sabe disimular, pensó el chico ― Pero igualmente, muchísimas gracias, me salvas el curso.]
― No exageres ― dijo ella ruborizándose.
[ ― ¿Ya escogiste un vestido? ―.]
― No se cual, hay demasiados ―.
[ ― Podríamos ir combinados si te parece ―.]
― Suena buena idea. ¿De qué color es tu traje? ―.
[ ― Obviamente negro. Es el más básico. ¿Y si coges uno negro también? O blanco, esos son los que más combinan ―.]
Mientras ella le escuchaba, encontró un vestido negro, encima de un banco. Era bastante bonito.
― Chris, creo que lo he encontrado. Solo me lo tengo que probar ― dijo apreciándolo más.
[ ― Me alegra saber eso. Estoy seguro de que te va a quedar genial ―.]
Se sonrojó tras escuchar eso y dijo ― Gracias Chris, también estoy segura de que el traje te quedará de maravilla.
[ ― Jeje. Bueno, te tengo que dejar porque cierto sujeto insiste en que juegue videojuegos con él. ¿Vendrás a vernos al partido del domingo? ―.]
― Eso ni se pregunta ya. Nos vemos el domingo. Chao ―.
― Por fin te encuentro, ¿Con quién hablabas? ― dijo su madre acercándose a ella tras finalizar la llamada.
― Con Chris, el que me va acompañar al baile ― su madre sonrió divertida para abrazarla y empezar a caminar juntas.
― Me gusta el vestido que has cogido, vamos a los probadores. Mientras, háblame de ese Chris... ―.
― Es Chan mamá, el amigo de ChangBin... ―.
― ¿¡Chan!? Los amigos de Bin son un encanto, aparte de ser apuestos. Hija, que grandes gustos. Lo sacaste de tu mamá obviamente ― dijo para hacerla reír, lo cual consiguió al instante.
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Soy Felix en la vida, esa amiga que no sabe disimular cuando esta el crush de alguna amiga suya. Simplemente, si pongo una cara seria para disimular me acabo riendo siempre.
