°14°

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Deian se encontraba a un lado—¡El Fuji! ¡Su cabeza es el monte Fuji! —Exclama Itadori señalando a Jougo

Satoru había llegado al lugar donde dejó a Itadori junto a Deian, bajaba las escaleras a un paso tranquilo viendo el brillo del televisor iluminar un poco la habitación, se detiene bajo el umbral de la entrada llamando la atención del pelo grisáceo.

— Prometí no abandonarlo. Y no es mi intención... —Dijo aquel hombre de la película.

— ¡Sam! —Exclamó el otro sujeto de la película.

Itadori estaba sentado en el sofá con ambas manos sobre la cabeza del peluche boxeador dormido. Ni siquiera parpadeaba por lo concentrado que se encontraba.

Vaya, aprende bastante rápido. —Piensa Satoru posicionándose detrás del sillón, Deian se levanta despacio de la mesa y se le acerca para quedar a su lado.

— Vámonos. —Habló el sujeto de la película.

Yuuji. —Llama Satoru asustando al nombrado, dándole gracia a Deian.

— ¿Gojo-Sensei? —Itadori voltea para ver a ambos curioso, aún manteniendo sus manos sobre la cabeza del peluche. Este seguía dormido.

Satoru Sonrió ante eso y acaricio la cabeza de Deian, sabía que posiblemente le habrá dado un consejo.

No parece haber problema aunque le hable. —Piensa Satoru y Deian asiente, el albino sabía que le estaba leyendo los pensamientos.

— ¿Pasa algo?  —Pregunta Itadori viéndolos algo extrañado.

— Eso mismo quiero saber yo. —Comenta Deian cruzándose de brazos.

Pronto podrá aumentar la potencia y avanzar a la siguiente etapa. —Satoru sonríe leve ante el pensamiento— Nos vamos, Yuuji, Deian. —Itadori lo mira ligeramente sorprendido pero a la vez confundido— Nos vamos de excursión. Te enseñaré el pináculo de las batallas de hechicería, la Extensión de Dominio.

Deian abre los ojos sorprendido y voltea a ver a Satoru, por la sonrisa que le dedico el albino supo de inmediato que le ha guiñado un ojo.

Satoru baja a Itadori con cuidado, para que el chico posara sus pies sobre el agua sin hundirse, Itadori se encontraba en el lado derecho del albino y Deian al lado izquierdo.

— ¿Por qué no nos hundimos? —Pregunta Itadori toqueteando el agua con su pie sorprendido— Sensei, hace diez segundos estaba en la escuela, ¿no? ¿Qué pasó? —Itadori mira a Satoru confundido.

— Vinimos volando. —Responde con simpleza Satoru.

El recipiente de Sukuna. Deian Yamada. Así que seguían con vida. —Piensa Jougo frunciendo el único ceño que tiene.

—Deben incapacitar a Gojo Satoru y hacer que Ryomen Sukuna, Itadori Yuuji y Yamada Deian estén de su lado. —Recuerda las palabras de Geto.

Debilidad -Jujutsu Kaisen Where stories live. Discover now