siempre tuya

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De vuelta en la habitación, Poncho le contó a Any la idea de su padre.Poncho: si no quieres ir, le hablaré poco. - le acarició el hombro.Cualquiera: por supuesto que lo haré, me encantó mi pasión sogrinho y no haría un deshacer de estos. Y Ricardo va a hablar y acabar con toda esta escultura de una vez por todas.Poncho: aquí vienes otra vez con esta historia de Ricardo. - Los celos comenzaban a salir - Me disculpé con él, pero no es por eso que voy a confiar en él. ¿Quién puede decir que simplemente no lo hizo para acercarse a ti?Cualquiera: ¡Cielos de poncho! Estás siendo infantil. Si iba a estar enojado o sospechando de cada mujer que se te acerca, habría cortado la cabeza de la mitad del equipo de producción allí en la estación.Poncho: oh, es diferente. Ninguno de ellos te ha estado molestando desde que conoces a la gente.Cualquiera: es solo una broma de primos. Y detengámonos aquí antes de que haya una pelea.Poncho, no quiero pelear contigo. - La abrazó con besos - Odio pelear contigo.Cualquiera: Poncho ya! Necesito prepararme para que podamos ir. - habló riendo y corriendo al baño.Poncho bajó a advertirle a su padre que saldrían con él, en menos de una hora Poncho, Any, Alfonso padre y Ricardo salieron juntos.Ricardo: ¿A dónde vamos tío?Alfonso padre: al parque de atracciones que hay en la ciudad.Cualquiera: Me encantó! ¡Quiero comer mucho amor de manzana Ponchito!Poncho: lo que quiera mi princesa.Ricardo: Así que mientras se lamen con caramelo, voy a ir a cazar algunos gatitos allí.Poncho: pero eso es todo lo que puedes pensar. - habló en un tono desagradable.Ricardo: tranquilo ahí señor derecho porque ya tienes el tuyo, yo estoy buscando el mío.Padre de Alfonso: ya sabes Cualquiera, la idea de Ricardo de buscar una mujer es besar por los tres al día. - se rió de la cara de su sobrino.Cualquiera: es más o menos la cara de ella misma. - se rió también.Ricardo: mi vida personal se convirtió en un caso de análisis, solo el que me faltaba.Se rieron, menos Poncho que estaba cada vez más molesto por el enfoque de Any y Ricardo.
Ya en el parque, Ricardo desapareció de la vista, Any, Poncho y Alfonso padre, fueron a buscar la manzana del amor y luego comenzaron a discutir qué juguete ir primero.Cualquiera: Yo soy la dama y ustedes como hermosos caballeros deben ceder. - argumentó sonriendo - Y quiero ir en la noria.Poncho: vamos entonces, pero luego quiero subirme a la montaña rusa.Alfonso padre: para mí hace mucho ya que luego me acompañan en el tren fantasma.Cualquiera: cerrado, ahora vamos.La tarde estaba siendo agradable y observada desde la distancia, esperando un resbalón.Tan pronto como se bajaron del tren fantasma, Any se excusó para ir al baño mientras Poncho y el padre de Alfonso estaban en el patio de comidas.Pasaron los minutos sin que Nadie volviera.Poncho: se está llevando a su padre. - dijo preocupado.Alfonso papá: espera un poco más, sabes que las mujeres tardan un rato cuando van al baño.Poncho: solo un minuto más. Cruzó los brazos.Alfonso Papá: mientras tanto voy a comprar un helado. ¿Lo quieres?Poncho: no padre, gracias.Tan pronto como el padre de Alfonso se distanció, Poncho sintió una mano en su hombro y se volvió para mirar.Poncho: ¿qué estás haciendo aquí Damayanti?Damayanti: simplemente salir con mis amigos. - les señaló un grupo de chicas de la costa - ¿Y tú?Poncho: también saliendo con mi papá y Any.Damayanti: No vi a tu padre. Pero cualquiera que vi desde lejos, estaba con Ricardo en la parte trasera del parque.Poncho levantó una ceja: a es, ¿viste es?Damayanti: Vi que sí. - Habló un rato - hace unos minutos.Poncho: gracias por la información. - respondió seco.Damayanti: Bueno, estaré allí. - lo saludó con la mano y regresó al grupo de amigos.Poncho ardió de ira y celos cuando su padre regresó.Alfonso padre: ¿qué pasó hijo? Te ves gracioso.Poncho: no es nada padre, solo necesito confirmar una cosa.Se levantó dejando atrás a su confundido padre.Cuando llegó a la escena que Damayanti havi dijo, vio a su primo besando a una mujer, pequeña, larga y castaña, delgada, jeans y chaqueta blanca. No quería creer lo que sus ojos veían, sin fuerzas para acercarse y los celos quemándolo y cegándolo a cualquier otra cosa, regresó a donde había dejado a su padre.Poncho: Papá, me voy.Alfonso papá: ¿y dónde está Any?Poncho: No sé, no me siento bien. Quédate aquí y espérala.No le dio a su padre la oportunidad de hablar y ya se había ido entre la multitud.