Dame una Razón (camren)

Capítulo 15

Al escuchar que se abría la puerta principal, Camila se quedó rígido por una fracción de segundo hasta que Lauren gritó rápidamente: "Soy yo". Esperando hasta que entrara en la habitación, Camila preguntó: "¿Qué haces en casa?".

"La última vez que revisé, vivía aquí".

"Lo sé, pero durante las últimas dos semanas has estado pasando los fines de semana en casa de Duane".

"Bueno, no este fin de semana".

"¿Problemas?"

"No, en realidad no", dijo Lauren. "Me voy a poner algo cómodo y tomaré un poco de vino. ¿Quieres una copa?"

Arrojando su libro sobre la mesa de café, Camila dijo: "Ve a cambiarte. Traeré el vino".

Unos minutos más tarde, Lauren volvió vestida con pantalones de chándal y una camiseta, y se dejó caer en el sofá junto a Camila. Abrió los analgésicos que tenía en la mano, extrajo dos, se los metió en la boca y los tragó con un Merlot con cuerpo.

"Estoy bastante segura de que no se supone que se tomen con eso", dijo Camila, señalando las pastillas y luego el vino.

"Pregúntame si me importa".

"¿Qué ocurre?"

"Nada".

"¿Es esta la parte en la que nunca me mentirás?"

"¿Debes recordar todo lo que digo?"

"¿Debes siempre pedirme que te dé una razón?"

Con un suspiro, Lauren se apoyó en los cojines y se pellizcó el puente de la nariz. "Duane y yo tuvimos una pequeña discusión esta noche".

"¿Una pequeña?"

"Una grande".

"¿Puedo preguntar por qué?"

Con un resoplido, Lauren se inclinó, recogió los analgésicos y agitó la botella.

La frente de Camila se arrugó mientras intentaba descifrar la pista. "¿Se enojó porque tienes calambres?"

"No exactamente, pero estás cerca".

"Estoy perdida".

"Cuando me vio tomar las pastillas me preguntó qué me pasaba, y le dije, y luego toda su actitud cambió. Dijo que si lo hubiera sabido, se habría saltado esta noche y habría salido con sus compañeros".

"¿Por qué?"

"Porque tener sexo durante mi periodo le disgusta, y se dio cuenta de que no iba a tener esta noche".

La boca de Camila se abrió, mirando a Laura como si estuviera aturdida. "Tienes que estar bromeando".

"¿Me estoy riendo?"

"¡Qué tontería!"

"¡Lo sé!"

"Bueno, tanto para que sea un buen tipo".

"Ese es el problema, Camila, normalmente lo es. Estas últimas semanas han sido geniales. Quiero decir, realmente genial y nos lo hemos pasado genial, pero luego aparece algo estúpido y lo pone todo patas arriba".

"¿Entonces qué vas a hacer?"

"¿Qué quieres decir?"

"¿Vas a verlo de nuevo?"

"No sé".

"Te mereces algo mejor", dijo Camila en voz baja mientras tomaba un sorbo de vino.

"¿Qué dijiste?"