Bitter Chocolate and Honey 🍯🍫 (Español)

"Tienes Que Salir De Ahí"

La joven Alfa suspiro tras salir por fin del viejo edificio, se sentía exhausta después de trabajar tanto.

—Noona— Jung-Su se aferro a uno de los brazos de su hermana como de costumbre —¿Qué sucede?— Man Wol acarició los cabellos del menor, buscando tranquilidad —Ya organice todo para que ese hombre se vaya, ahora, vamos a casa a descansar— el Omega le observó con cariño —Hmm... Nada me haría más feliz que eso— con media sonrisa en el rostro, Man Wol se dejó guiar por su pequeño Dongsaeng.

La mayor apoyo su cabeza en la ventana del auto, Jung-Su había insistido en querer manejar para dejarle descansar al menos un rato. Pero ¿Cómo descansar?

Su corazón dolía y pesaba, se sentía vacío y triste.

Haber visto la marca en el cuello de Jae le había bajado incluso la presión. Se sentía una perdedora por ni siquiera intentar tener una oportunidad con el chico.

En cambio, prefirió arrojar al pequeño Omega a su mejor amigo. Ya que, después de todo, sentía que ellos estarían mejor juntos, se conocen desde hace más tiempo y ella solo es una intrusa en la vida de Jae.

"Incluso me grito que desapareciera de su vida..."

Asimismo, Huenning si puede darle una vida cómoda, lujosa y estable como él Omega estaba acostumbrado; en cambio ella... No tenía esas posibilidades.

"¿Encontraremos a otro con tanta compatibilidad?"

Su lobo había hecho acto de presencia, siempre se mostró sereno y apacible ante la situación, pero esta vez se pudo escuchar afligido.

"No tengo idea..."

—Noona...has estado suspirando mucho hoy ¿Te preocupa algo?— el menor no pudo evitar preocuparse al ver él estado decaído de su mayor —Son cosas del trabajo y la UNI... No te preocupes— la chica extendió su mano y pellizco con sutileza la mejilla contraria —Si me debo preocupar, estas extraña desde que fuimos a ayudar a Huenning ¿Es por ese Omega?— preguntó nuevamente el menor y la Alfa podía jurar que en estos momentos odiaba un poco el sexto sentido del Omega —Jung-Su... Odio un poco que tengas un sentido tan agudo a veces— bufo la chica y eso hizo que el menor formará un dulce puchero —No es mi culpa...— murmuró inflando sus mejillas de manera infantil.

La Alfa suspiro nuevamente y sonrió con tranquilidad, aunque se sintiera un poco vacía, al menos tenía un dulce hermano menor que le hiciera reír y olvidarse un poco de sus problemas.

(...)

Jung-Su aparco el vehículo junto a la motocicleta de su hermana, luego ambos bajaron y se dirigieron a la residencia de esta última.

—Se que dije que ibas a descansar, pero...— el menor no termino su excusa cuando sus tripas gruñeron en protesta —¿Tenías hambre, gatito?— preguntó la mayor y le regalo una pequeña sonrisa burlona, lo que hizo que el menor se sonrojara más de lo que ya estaba por escuchar el apodo con el que su hermana solía llamarle.

—Ha-Hace muchos años q-que no me llamas a-así...— balbuceo el menor —Una vez me gritaste que dejara de decirte así, que ya no eras un bebé— afirmó la chica recordando esos momentos en los que solía molestar a su lindo hermanito —¡Hazlo de nuevo!— exclamó el menor, mostrando sus adorable mejillas color carmesí —Hai, Hai— asintió gustosa la mayor.

Al llegar a la entrada de su apartamento, la pareja de hermanos se llevó una gran sorpresa —¡Dojin Sunbae!— Man Wol corrió hasta el Omega con notables heridas visibles.

Lee Dojin se encontraba sentado en la entrada del apartamento de la chica, sus brazos abrazaban algo con fuerza y su aspecto era deplorable, golpes y sangre a la vista.