Bitter Chocolate and Honey 🍯🍫 (Español)

"Poniendo Todo En Marcha"

Una adormilada y molesta Man Wol se movía debajo de las sábanas, movía su mano de un lado a otro buscando el aparato que emitía tan horrible ruido temprano en la mañana.

Al localizar su móvil, procedió a apagar la molesta alarma y estirarse aún debajo de las sábanas. Luego de 5 minutos la joven se levantó de una improvisada cama, compuesta de un colchón en el suelo y un par de sábanas y almohadas alrededor.

Se acercó vagamente bostezando a una de sus maletas, para buscar sus cosas de higiene personal y ver si con una buena ducha mañanera todo ese cansancio de haber volado la noche anterior se le iba, como también, ese "pequeño problema" que tenía como siempre al despertar.

Luego de tener todo lo que creía necesario la Alfa fue hasta el baño donde se encerró.

Primero abrió un poco la llave para que el agua se calentara levemente, luego siguió con recoger su cabello y para finalizar despojarse de su pijama.

Entró en la ducha y dejó que el agua no tan hirviendo recorriera  cada centímetro de su cuerpo. Man Wol se sintió relajada y recordó brevemente su encuentro de anoche con un peculiar Omega.

Sin duda era algo que debía decirle a su mejor amigo cuando le viera.

Luego de una larga ducha y sentirse nuevamente con energías, Man Wol tomo un momento su móvil para responder o revisar si tenía alguna llamada de sus padres y, dio una pequeña sonrisa al notar que tenía mensajes de Huenning, su "hermano".

Huenning para Man Wol, era más que un buen amigo, él era esa persona que siempre la apoyaba en sus decisiones y locuras, en buenas y malas. Su amistad ya pasaba a ser hermandad de la pura.

Luego de calmar a su pobre hermano y avisar de su llegada, la joven Alfa se dispuso a buscar y ordenar por tamaño las cajas de su mudanza.

Man Wol analizó la situación y procedió a primero armar los pocos muebles que tenía, luego ordenar y colocar los objetos de la cocina y decorativos en su respectivo lugar.

La joven busco una caja mediana que se encontraba localizada en la cocina y, en el interior de la misma se encontraban algunas herramientas, las cuales eran necesarias para su trabajo.

Tomó las herramientas y se dedico a abrir primero la caja que contenía una mesa para cuatro personas, está por suerte no necesita herramientas para ser armada, por lo que Man Wol agradeció no tener todavía que ingeniárselas para usar un taladro o martillo.

"Será un largo y tedioso día... Ah" tras ese pensamiento la joven soltó un largo y profundo suspiro, intentando controlar su temperamento al ver que no había nisiquiera iniciado con algo complicado y ya tenía una de las 4 patas de la mesa, rota en su mano.
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El pequeño Omega se oculto y acurrucó aún más en la cómoda cama, no sentía ninguna preocupación y sólo se concentraba en la suavidad que le brindaba ese espacio acolchado, blando y cálido.

Pero como es de esperarse, toda su tranquilidad y paz se vio interrumpida por el sonido de su estómago gruñendo y gritando por comida.

Su pequeña y abotonada nariz se movió con curiosidad al sentir un delicioso aroma entrar y dispersarse en toda la habitación.  Jae no tuvo más remedio que abrir con pesadez sus ojos e incorporarse levemente en la cama.

Frotó con cuidado sus ojos y dio un largo bostezo, para luego observar y percatarse al momento que no sabía dónde se encontraba y de quien era la habitación.

Hizo un esfuerzo en su memoria y recordó al instante todo lo que paso el día anterior. A causa de la adrenalina su mente había bloqueado ligeramente el hecho de que se había escapado de su casa y ahora estaba en casa de su mejor amigo.