Capítulo 01

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Las cigarras chirriaban a través de la ventana abierta, lloraban y clamaban, cada una de ellas denunciaba el clima inusualmente caluroso de este verano.

En aquel momento Ji Xiao llevaba un camisón ligero y dormía con un abanico en mano, rezando con las cigarras para que este día de verano se fuera rápidamente, y al siguiente instante, sintió que un aire frío la cobijaba hasta perforar profundamente su alma.

La habitación estaba tan fresca como si tuviera aire acondicionado, y el olor a menta, mezclado en el aire frío emitido por el aire acondicionado, se posó sobre la piel de Ji Xiao en un baño fragante, y el refrescante estímulo eliminó instantáneamente la pegajosidad de su piel antes de que el sueño la invadiera.

Ji Xiao no se lo pensó dos veces en saber por qué había aire acondicionado en su dormitorio, así que sólo reaocomodó la almohada bajo su cabeza y volvió a dormir plácidamente.

El olor a menta impregnó más su cuerpo a través de su piel, y su sangre, que había estado bombeando rítmicamente, comenzó a agitarse.

Ella sintió que su corazón latía cada vez más rápido, un fuego de deseo inquieto se acumuló en su corazón, y un repentino cosquilleo surgió inexplicablemente en su nuca, como si algo estuviera a punto de salir de su cuerpo.

—Señorita, despierte, señorita... —Una voz desconocida llenó los oídos de Ji Xiao.

La voz era cautelosa y llena de timidez.

Ella no sabía a quién llamaba la voz, sólo cerró los ojos y aspiró un par de veces más la menta fresca pululante, tratando de usarla para suprimir esa inexplicable inquietud en su corazón. Pero cuanto más sentía esta inquietud, más le costaba contenerla, y desde su nuca sentía como si algo fluyera, siendo pegajoso y húmedo, en su cuello.

¿Hmm?

Ji Xiao recordó que llevaba un camisón.

—Señorita...

Una voz cautelosa volvió a replicar, y esta vez una mano la acompañó.

Golpeó suavemente el hombro de Ji Xiao unas cuantas veces y se retiró rápidamente.

Esta vez Ji Xiao sabía a quién llamaba la voz.

Pero una duda aún mayor surgió en su mente, ¿señorita? ¿Cuándo se convirtió ella, una pobre estudiante en prácticas de maestra de cuarto año, en una señorita?

Ella abrió los ojos con incertidumbre, no obstante, encontró una oscuridad en su visión.

—Señorita, por favor póngase esto primero.

La voz dijo y se acercó al costado de la joven. Ella también se ajustó a la oscuridad de su visión en ese momento, y apenas pudo distinguir el contorno de la persona frente a ella junto con la condición de la habitación.

La persona con la que hablaba era una joven vestida de criada, y la trataba con gran respeto e incluso algo de asombro...

La habitación en la que se encontraba no tenía lo que ella creía ser aire acondicionado, ni siquiera una ventana para la ventilación, y el frescor, incluso dando un poco de frío, allanó las paredes de la misma.

No era la estrecha cama del dormitorio en la que se encontraba, sino un mullido y acogedor sofá.

Tampoco llevaba un camisón, sino un pantalón de pijama de raso morado algo coqueto...

El sentimiento maníaco-depresivo seguía dando vueltas en el cuerpo de Ji Xiao, su mente estaba revuelta, las pistas estaban justo delante de ella, pero no podía deducir nada.

La perfecta heroína quiere tenermeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora