NINE

2.5K 239 2
                                    

CAPÍTULO NUEVE - CENAS INCOMODAS CON UN DUQUE

Suspiró contenta cuando llegó a la casa Bridgerton temprano en la mañana, estaba cansada y quería descansar. Se coló en la casa, sin causar ningún revuelo a la vista mientras se quitaba los zapatos con cuidado, subiendo de puntillas por la gran escalera. Cuando llegó a su habitación, se sorprendió al ver a su hermana despierta, sentada en su cama compartida esperando que ella llegara a casa.

–Daphne, me asustaste–. Se quedó sin aliento cuando la vela apenas encendida creó una sombra en el rostro de su hermana. Daphne frunció el ceño, constantemente confundida acerca de su hermana mayor. Calista era una mujer sin un estado de ánimo constante, sentía que su hermana era casi una hipócrita actuando en sociedad pero haciendo lo que quería en la noche. A Daphne no le gustó, había decidido mantener el secreto de su hermana, pero ¿cuánto tiempo podría seguir sin hacer las preguntas que necesitaba saber?

–Estuviste con él otra vez, ¿verdad?– Daphne se burló un poco al pensar en su hermana y ese hombre, el hombre que había amado a su hermana durante años.

–¿Qué quieres que te diga, hermana?– Calista suspiró, quitándose el abrigo y colocándolo suavemente sobre la silla de terciopelo que estaba en la esquina. Escuchó el movimiento de su hermana saliendo de la cama y acercándose lentamente a ella. Daphne se paró frente a su hermana, bloqueando su vista de todo lo que estaba a la vista. De repente, abrazó a Calista y esto la sorprendió porque podía decir que Daphne estaba luchando por aceptar lo que le había dicho la otra noche.

–Te adoro, Calista. Lamentablemente, estoy confundida. Por favor, arroja un poco de luz, me está volviendo loca. No te casarás con un hombre y, sin embargo, te entregas libremente a él–. susurró Daphne, su hermana acarició su cabello que estaba ondulado con el constante peinado. Esa noche Calista explicó lo mejor que pudo, respondiendo la mayoría de las preguntas de Daphne, sin querer quitarle su mente inocente.

–Si no me hubieran obligado a irme de Londres, me habría casado con Arthur en un abrir y cerrar de ojos, pero él es mi persona adecuada en el momento equivocado. El momento nunca será el adecuado para nosotros y lo he aceptado. Arthur se dará cuenta de esto pronto–. suficiente, no estuvo aislado durante años como yo.

Había hecho todo lo posible para explicar los caminos de un hombre y una mujer, pero fracasó miserablemente, quería que su hermana permaneciera inocente para siempre.

Su madre había invitado al duque de Hastings a cenar con ellos la noche siguiente, una sorpresa que sorprendió tanto a Anthony como a Daphne. Era casi poco ortodoxo que lo invitaran ya que Calista no tenía intención de casarse solo por casarse. Estuvieron corriendo toda la tarde cuando le llegó la noticia de que el duque estaría en su presencia.

–¿No has oído de lo que estamos hablando? Por lo que sabemos, Whistledown puede ser un intruso que vive en Bloomsbury, de todos los lugares–. Eloise exclamó en la mesa de la cena por la noche. Los adultos y los niños comieron en la misma mesa como de costumbre, creando un ambiente lúdico.

Calista había sido apretujada rápidamente en el asiento junto al duque de Hastings por su hermano mayor, por temor a que Daphne y él se acercaran demasiado. Disfrutó de la vista del Duque, finalmente dándose cuenta de que él era el hombre con humor causado por su hambre en el baile de Lady Danbury hace unas noches.

–¿Qué debería ser tan terrible en Bloomsbury? ¿Que la gente de allí realmente trabaje para ganarse la vida?– Benedicto preguntó.

–Ella parece ser alguien con acceso–. Daphne dijo, cortando su bistec.

–¿Quién sabe si Whistledown es siquiera una mujer?– Colin se unió a la conversación, bebiendo su vino tinto entre risas junto a sus hermanos, lo que provocó una conversación que Calista o Eloise seguramente argumentaron de manera diferente.

El duque de Hastings se divirtió increíblemente con sus conversaciones familiares, nunca fue alguien que experimentara el amor como lo que vio con los Bridgerton, fue saludable presenciarlo.

Calista se burló de su gemelo, las palabras de Colin.

·¿Porque ella es simplemente demasiado buena para ser otra persona que no sea un hombre?– Ella gritó con incredulidad y falsa sorpresa.

–Bueno, creo que es bastante obvio que la escritora es Lady Danbury.

–A Lady Danbury le gusta compartir sus insultos con la sociedad directamente. Nunca se molestaría en escribirlos todos–. Calista se rió.

–¿Podría ser Lady Featherington?– preguntó Hyacinth.

–¡No!– Todos en la mesa se echaron a reír, Lady Whistledown nunca tiene una buena palabra que decir sobre los Featherington.

–Imagina el escándalo absoluto–. Calista le dio un codazo a Daphne que estaba sentada a su lado y su hermana sonrió ante la idea.

–Debe perdonar este debate bastante ingobernable, Su excelencia–. Violet se volvió hacia el duque de Hastings, provocando una conversación con el hombre al lado de Calista que levantó la ceja hacia su madre. Seguramente estaba tramando algo. Continuó como si estuviera sumido en sus pensamientos, comiendo, como de costumbre.

–Tonterías. Lo encuentro entretenido. Todos ustedes en una mesa, incluso ustedes niños.

–Bueno, me doy cuenta de que puede estar pasado de moda, pero nos gustamos. La mayor parte del tiempo. Debería unirse a nosotros más a menudo, Su excelencia. Tal vez cuando viajemos a nuestra casa de campo. Sería muy bienvenido–. Violet le sonrió al joven duque, por supuesto que era su plan emparejar a Daphne con él, siempre se trataba de asegurar a las chicas, principalmente a Daphne.

–Nos encontramos sentados uno al lado del otro, señorita Bridgerton–. La voz del Duque la sacó de su ensoñación, volteando la cabeza para perforar sus ojos una vez más, era una delicia por decir lo menos.

–Me gustaría pensar que estás feliz por eso–. Ella sonrió levemente, recordando cómo él se había acercado a ella por primera vez y la había complementado de inmediato. Frunció el ceño, recordando que Arthur la había sacado de la incipiente conversación con el duque, ¡ni siquiera sabía su nombre!

–Tal vez, señorita Bridgerton, tenga razón.

–¿Por qué mi madre lo ha invitado a cenar? Supongo que está tratando de jugar a la casamentera con respecto a mi hermana. Soy consciente de su amistad con mi hermano mayor. Si eso fuera poco, también soy consciente de las cosas que tiene cierta escritora. Escribió recientemente sobre usted. Es un libertino, de principio a fin–. Ella rimaba, bajando la voz para que solo él pudiera escuchar el tono de advertencia. Había escuchado historias sobre el duque, él tenía mucha experiencia sexual por los chismes de la ciudad. No podía permitir que Daphne cortejara a un hombre como él, sin importar el título. Sí, Calista Bridgerton era una hipócrita pero muy discreta, buena.

Se sorprendió con su confianza, una vez más. Nunca había conocido a una mujer con tanto resplandor. Podía alimentar al sol, podía navegar en alta mar, era increíble incluso cuando lo estaba calumniando en su cara.

–Doble n-nota, señorita Bridgerton–. Dijo sin expresión facial, intentando parecer tranquilo y sereno cerca de la mujer que había encendido un fuego dentro de él, sin saberlo.

–Me alegro de que estemos en la misma página, Su excelencia.

–¿Asistirá al baile Vauxhall?– Preguntó, llamando la atención de algunos otros sobre su repentino interés en la hija mayor. Se preguntó si podría verla allí, la emoción de su moda era de hecho un evento en sí mismo. No diría que disfrutaba de su compañía, ella tenía una personalidad que era la verdadera Diamante de esta temporada.

–Puede, puede que no–. Ella respondió a la ligera. Él sonrió levemente ante su naturaleza extravagante, ella era un completo laberinto, no era como ninguna otra mujer que hubiera conocido, no estaba necesitada ni desesperada.

–Si asisto, no tengo ninguna duda de que me notará primero, Su excelencia.

CALISTA - TRADUCCIÓN Место, где живут истории. Откройте их для себя