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Dieron las siete y media de la noche, las cosas ya estaban listas y ordenadas, las bebidas frías estaban en una hielera o en el refrigerador, al igual que el hielo, mientras que otras bebidas descansaban en la barra que tenían en la casa Kim, hecha especialmente para ellos, ya que, tenía "Kim" grabado en el granito, junto a los nombres de cada miembro de la familia.
- ¿A qué hora dijeron que debían de llegar? - preguntó Kai, se encontraba sentado, cruzado de brazos y piernas, en el gran sillón de la sala.
- Dijimos que, a las siete cuarenta, ya sabes que llegarán a las ocho. - se encogió de hombros Jake.
La gente comenzó a llegar a eso de las ocho con cinco minutos, llegaban solos o por grupos en un solo auto, como siempre pasaba en fiestas donde había alcohol. Se notaba quién era el conductor designado de aquellos grupitos que iban llegando.
Jake esperaba en el comedor, viendo hacia la puerta principal, esperaba por la llegada de su novio.
Comenzó a hacerse más noche, las personas ya estaban algo tomadas y la música casi reventaba los oídos de los que bailaban en la pista de baile.
Por otro lado, estaban los Jung, los hermanos se preguntaban con la mirada si ya deberían de entrar, estaban algo indecisos frente a la puerta principal. No es que no quisieran entrar, claro que querían, pero, la cosa era que no sabían si los Kim iban a estar muy ocupados como para poder estar con ellos durante la fiesta; no tenían amigos demasiado cercanos como para poder confiar en que no harían estupideces por el alcohol, por eso su única salvación eran los hermanos Kim.
- ¿Aquí es la fiesta de los de universidad? - unos chicos, que parecían ser de primero, preguntaron hacia Beomgyu, el mayor asintió y abrió la puerta, así se dieron ánimos de entrar.
La fiesta era neón, así que, todas las personas tenían pintura neón y palitos brillantes, unos bailaban al son de la música, mientras que otros platicaban en la sala o comedor de la casa, aunque también había otras personas que estaban en la alberca.
- ¡Que bueno que llegan! - Kai se acercó a los Jung y le puso un collar brilloso a cada uno, haciéndolos entrar del todo a la casa. - Jake está en la barra, esperando por Sunghoon, Taehyun está en el sillón donde hay un montón de chicas acaparando su espacio personal, así que, sugiero que vayan a marcar territorio. - soltó una risilla al ver a los Jung correr hacia donde su chico Kim se encontraba.
Heeseung sonrió un poco incomodo cuando Kai lo miró.
- Venga, Heeseung hyung, estaba con Jay en el área de la alberca, allá no hace tanto ruido.
Kai y Heeseung caminaron mientras platicaban un poco acerca de que la fiesta tenía buena música y ambiente, a pesar de que hubiera personas alcoholizándose y moviendo el trasero hasta el suelo.
- ¡Beommie! - la sonrisa de Taehyun era demasiado grande y emanaba mucha felicidad, las chicas que estaban ahí se sorprendieron de su cambio de humor, pues, hace algunos segundos, tenía cara de querer matar a alguien.
