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NARRADOR ||
Su cabello negro caía por sus hombros de forma natural, poco arreglado. Sus ojos color café no lo habían mirado en toda la noche, pero se notaban tristes. Se concentro en como sus delicadas manos movían las piezas de ajedrez con mucha astucia, siempre se había destacado por ganarle con gran facilidad para luego bromear con ello. Le generaba curiosidad porque era tan buena, no parecia una chica que le gustara el ajedrez.
Ambos habían evitado hablar del tema principal por el cual la pelinegra estaba de visita esa tarde noche. No tenían una razón en específico por el cual evitarlo, pero harían cualquier cosa por pasar unos segundos más con la compañía del otro, aunque ninguno iba a admitirlo.
-Bien, ¿Qué te trajo por aquí?-Rompió el silencio, ese silencio tan comodo en que estaban hace ya mucho tiempo. Nuevamente no lo miro directamente a los ojos, pero levanto su vista del tablero para ponerla en el contrario.
-Traje a charlie, solo eso. Tú me invitaste una copa, ¿Tienes algo que decirme?-Le aclaro, mirando brevemente el vaso de whisky que seguía intacto, porque ella no bebía alcohol.
-Sonó a despedida, pero no un hasta luego, eso fue un hasta siempre.-Murmuro buscando las palabras correctas.-Me preguntaba si estas por irte de la ciudad una vez más, ya es algo habitual en ti, el hecho de irte.
Ella asintió.-Si, me iré por temas personales y laborales, sobretodo.
-¿Sin despedirte? ¿Es para siempre? ¿No ibas a decirme?
Suspiro pesadamente, manteniendo la calma ante la situación. Sus emociones y sentimientos en esos meses habían estado hechos un caos, incontrolables. Por obvias razones.
Pero, estaba tan orgullosa de ella misma por como se encontraba manejando la situación y esperaba, que en un futuro, su hijo también se sienta orgulloso de ella.
-No tengo que despedirme de ti, para empezar. Ni debo avisarte de lo que haré, porque no eres nadie.-Contesto con mucha seguridad en su voz, thomas comenzaba a perder el poder que tenía sobre ella.-Y si, esta vez sera para siempre.
-¿Donde iras?
Comenzaba a ponerse tenso, nervioso podría decir sé. Camino por la habitacion mientras fumaba un cigarro y en la otra mano tenía un vaso de whisky.
-Eso no es de tu interés, thomas. Lo lamento, pero prefiero mantenerme al margen por completo y guardar esa información.-Contesto levantándose, lista para irse de una vez por todas.
Él la miro, buscando su mirada de forma casi desesperada, no lo logro. Se dio cuenta que la había perdido y esta vez, no era una falsa alarma, lo sentía en lo más profundo de su pecho. Ella no volveria a él.
-Espero volver a verte, athenea.
-Me gustaría poder decir lo mismo, pero yo no deseo volver a verte thomas.
Esas ultimas palabras se clavaron como dagas en el corazón de thomas. No porque la amara, sino que por primera vez en mucho tiempo había perdido, ella lo habia dejado como si nada, robandole su papel de idiota.
Thomas era tan: "No me importas, pero necesito tenerte cerca para alimentar mi ego"
Un narcisista.
La quería, por supuesto, pero no de esa forma.. Solo le gustaba tenerla cerca, ahí, a su disposición. Pero, eso se habia terminado de una vez por todas.
Luego de tanto tiempo, logro decir un adiós definitivo, un hasta siempre que le dejaría a thomas un mal sabor de boca por mucho tiempo y a ella, le permitiría ser feliz. Un sentimiento que conocía poco, pero que deseaba sentir con todas sus fuerzas.
[NOTA ANTIGUA]
Gracias por leer <3 Estamos muy cerca del final Al fin! Jajaj Dejen un comentario lindo Lxs amo <33
