Nos volveremos a encontrar Parte II (Relatos De Arcadia)

Capitulo 8. Algo sabes

De un momento a otro,  el portal que se había abierto a los  pies de ella la había enviado al reino de las sombras.  Cosa que alerto todos sus sentidos, Helena estaba conciente que ese repentino cambio de ambiente no seria una simple coincidencia, así que se encontraba atenta a cualquier movimiento por pequeño que fuera.

Su primera idea había sido buscar una salida de ese lugar tan oscuro, pero el  portal se había cerrado apenas ella había caído, así que su única vía de escape  era esperar a que Clara abriera una salida. Y si eso no pasaba sabía que estaría en problemas por la naturaleza de su magia. 

Pero una presencia que se acercaba a ella la saco de sus pensamientos, y por fortuna logro voltear a tiempo para apartarse del hechizo que se avecinaba hacia ella.

-Vaya vaya vaya, miren quien cayó en mi trampa- exclamo Galván mientras le volvía a lanzar diferentes hechizos seguidos unos de otros, Helena con dificultad estuvo evitando uno tras otro y regresando los que podía.

-Serpiente traidora y cobarde- le grito ella furiosa mientras le lanzaba un rayo de luz con toda su energía,  pero  no era tan fuerte debido al lugar  - Me trajiste a tu terreno, por miedo a que  me vuelva a escapar.

- No pequeña escurridiza- dijo con una sonrisa mientras le lanzaba otro hechizo, el cual  ella no pudo escapar y termino por chocar contra una de las rocas que flotaban cerca de la pelea. Galván tomo impulso y sin darle tiempo de reaccionar se acerco a ella y la tomo de ambas manos para ponerla contra la superficie de la roca, llegando a  inmovilizarla.

- Que vergüenza la pequeña De Ambrosía no es nada sin la luz del día- se rió con fingida pena y sarcasmo - Eres tan débil como tu madre- afirmo. 

Esas simples palabras enfurecieron lo más profundo de ella y aunque no tenía Luz o plantas en ese lugar, aun poseía el hielo y concentrando toda su magia en sus muñecas logro quemar las manos de Galván.

-AHHG- grito de dolor  al sentir la quemadura en sus manos, mientras ella aprovecho el momento para empujarlo y cuando se lo quito de encima lo atacó con un  rayo de hielo el cual hizo que el se estrellara contra una  roca al otro extremo del lugar y por el impacto esta se rompió.

- No vuelvas a mencionar a mi madre. ¡JAMAS!- grito furiosa 

Volvió a concentrar su energía y siguió atacando con todos los hechizos que Skrael le había enseñado de niña, Galván levantó una barrera para protegerse y muy poco respondía a los ataques solo los detenía.

- Ya es suficiente- grito cansado después de unos minutos , mientras a su vez bajaba el escudo y creaba una onda de magia que sorprendió a Helena, ocasionando que diera vueltas por el vació del reino de las sombras y antes de poder recomponerse fue amarrada por brazos creados por la magia de Galván.

Ella forzaba sus ataduras moviéndose de un lado a otro al ver que el la esta acercado, pero todos sus intentos eran en vano, ya estaba débil por el esfuerzo mágico y estar en ese lugar empeoraba su estado. 

- Pequeña niña tonta- dijo  cuando la tuvo enfrente de el - Ya deberías darte por vencida, el tiempo de la era de Merlin ya a acabado.

- No mientras mi padre y yo respiremos Galván- exclamo muy molesta, sabía muy bien que no estaba en la mejor posición en ese momento , pero su orgullo  que recorrían por  su sangre, herencia que había obtenido por ser una De Ambrosía, no le permitía dar su brazo a torcer y mucho menos hacerle saber a Galván que sus palabras podían tener algo de verdad en ese momento, pero estas  tomaron más fuerza cuando siguió hablando.

- No te preocupes me encargare de eso en este momento- le respondió con una sonría burlona -Pero antes, me dirás en donde se encuentra el aprendiz de Merlin. 

Ella guardo silencio, no pensaba decirle  ni una sola  palabra sobre el tema, no pensaba tirar a Hisirdoux al vació, ni aunque su vida peligrara en ese momento, si algo le pasaba a ella o a su padre por lo menos estaría tranquila al saber que Galván nunca conseguiría romper su sello de magia, debido a que le faltaba una pieza.

- ¿Y ahora que te ha pasado?- pregunto este con gracia - Te han comido la lengua los ratones  que ahora no hablas- pero ella no hablo siguió forcejeando para liberarse de sus ataduras pero sin emitir palabra -Te he hecho una pregunta niña insolente- terminando de decir eso apretó su puño y las ataduras que la aprisionaron le lanzaron una descarga eléctrica .

-¡Aaaaah!- grito de dolor al recibir la electricidad en su cuerpo - ¡No lo se!- hablo desesperada debido a  lo que su cuerpo estaba recibiendo  -Te aseguro que no lo se- la electricidad se detuvo y ella agacho la cabeza debido al agotamiento causado por el dolor de unos segundos atrás.

-Ves que no era tan difícil responder - le comentó mientras la tomaba por la barbilla y la obligaba a mirarlo, la respiración de ella era entre cortada y solo pudo asentir, pero al ver sus ojos tan vacilante Galván noto que ella no contaba toda la verdad así que siguió hablando  - Pero, espero que no creas que yo me voy a tragar ese cuento de que no sabes nada- sonrió -Estoy seguro de que algo sabes, como el nombre del chico afortunado que resulta ser el sucesor de tu abuelo.

- Búscalo tu solo- le respondió secamente ella mientras apartaba de forma brusca su cara de la mano de él

- Como te atreves hablarle así a tus mayores  niña maleducada- escupió furioso - Ahora si conocerás lo que es bueno.

Su hechizó volvió hacer activado y los gritos de Helena se volvieron a escuchar por todo el vació del lugar, sus ojos rápidamente se llenaron de lagrimas y sentía como sus fuerzas comenzaban a dejarla - Por favor detente, ¡PIEDAD!- dió un grito desgarrador pero por más que luchaba, por más que intentaba liberarse el dolor era tan fuerte que no le permitía concentrarse en su propia magia. Pronto llego a penar que había perdido y que jamás volvería a ver a su hermano, a sus amigos y mucho menos al hermoso chico de ojos avellana.

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Buenas madrugadas, días, tardes o noches,  dependiendo a que hora me leas, déjenme anúnciales  que por fin la procrastinación me dejo tranquila, la verdad es que tenía días con la idea de este capitulo, pero el estar procrastinando y no encontrar las palabras adecuadas me estaban impidiendo subir el capitulo, pero ahora si. Y todos contentos.

Nos leemos pronto. Que les vaya bien en su vida.