Capítulo 11. Reproche.

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Llámenme exagerada si quieren, pero no me importa.

Habian pasado un par de días desde esa noche en la que conversé con Levi, y aún no le digiria la palabra.

Bueno, miento. En realidad si hablo con el. Pero de una forma profesional y lo justo y necesario. Desde esa noche no quise volver a intentar conversar con el sobre otros temas como antes, simplemente lo atendía, lo ayudaba a cumplir sus ejercicios para la movilidad de sus piernas y nada más.

Me pasaba mitad de los días con Levi y la otra mitad con Gabi, ayudando en queaceres de la casa.

Aunque ha sido difícil hacer que ella olvide el tema del supuesto interés de Levi.

Flashback.

Habiamos ido a vernos unos vestidos para cuando tengamos el evento de la reina de Pararis. Gabi habia escogido un vestido rosa pálido que le quedaba muy bello, en cambio yo decidí por uno simple color celeste con bordados delicados y con algunos patrones sensillos.

En camino a la casa, no dejaba de hablar de lo mucho que le gustaria a Levi mi nuevo vestido y que todavía faltaba que nos probaramos maquillaje y peinados para convinar. Hasta que me harté.

-¡Por favor Gabi! Ya basta. Levi no se interesa en mí y tampoco se interesará en este absurdo vestido...

Tal vez fui dura, pero me sentia rechazada y enojada por el trato de mi paciente conmigo.

Gabi frenó en medio de la acera para mirarme sorprendida.

-¿Qué? No... Halley, a el sí que le interesas, y mucho...

-Eso no es cierto Gabi- suspiré y me senté en una banca cercana -por favor, ya deja el tema...

Ella se sentó a mi lado y me observó preocupada y a la vez algo incómoda.

-Halley ¿pasó algo?

Le empecé a contar todo lo transcurrido la noche anterior y como me sentí con respecto a las palabras de Levi. No le iba a mentir, me sentia mal.

Sabia que mi relación con Levi no debia ser de otra forma que no debiera ser, pero el saber que alguien se habia fijado en mí de alguna forma me habia emocionado de algún modo.

Creo que ya lo dije antes, Levi me parecía alguien atractivo y me llamaba mucho la atención en ese punto. No me importaba su condición en absoluto. Ni siquiera lo veía de forma romántica como si quisiese formar una relación con él.

Solo... me habia gustado que se hubiese fijado en mí.

Pero no era el caso.

-Levi tiene una forma de expresarse muy peculiar Halley, pero no es malo. Él solo se esconde en una coraza que...

-Pues esa coraza está muy reforzada y no hay forma de penetrarla. A Levi no le gusto ni le intereso o... ni siquiera me considera una amiga.

Me tomó del hombro antes de continuar.

-Lo siento mucho Halley, creí... creí que seria diferente.

-Descuida, no es tu culpa.

-Pero...- hizo una pausa antes de seguir y me miró de reojo -¿a tí te gusta?

¿Gustar? ¿Ese viejo cascarrabias que solo me trataba mal e indiferente y que no aprecia todo lo que hago por él? Tal vez sí. O no. Vaya a a saber dios.

Negué con la cabeza para restarle importancia.

-No me hagas caso, ni yo misma me entiendo.

𝓔𝓵 𝓬𝓸𝓶𝓮𝓽𝓪 𝓱𝓪𝓵𝓵𝓮𝔂  | 𝓛𝓮𝓿𝓲 𝓐𝓬𝓴𝓮𝓻𝓶𝓪𝓷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora