Me Gusta Mimarte

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Varias semanas después.

Como el griego había prometido, nada cambió entre ellos, la seguía tratando como siempre, como su diosa a la que amaba más que nada, una cosa que descubrió sobre Alex era que era muy celosa.

Casi todos los fines de semana salían junto y nunca faltaban las miradas de las mujeres que no le importaban verlo acompañado.

El rumor del embarazo de Alex se desmintió rápido, su admirador no tuvo nada que ver con este, desde hace varias semanas no había llamado o dejado alguna nota, pero tampoco Christian, Ted o Bastian sedia reducir la seguridad de sus mujeres.

Alex dormía casi todos los días en casa del griego, Alex descubrió que dormía mucho mejor y sin pesadillas cuando lo hacía con él, por lo que se quedaba más a menudo en su casa, más aún si estaba cansada, el griego por su parte estaba encantado de tenerla en su cama y despertar con ella entre sus brazos.

Sam se había mudado definitivamente con Ted, Alex no se lo tomó apresura, todo lo contrario, hasta le dijo a su hermano que se había tardado. La que pasaba más tiempo en el departamento era Madison y solo por las noches por su turno en el hospital.

Alex también se llevaba a Afi con ella, su canino y su griego se llevaban muy bien. Alex también se llevaba muy bien con Perla el ama de llaves del griego, Bastian le explico sobre la dieta que debía llevar y ella le preparaba ricos y saludables comidas para ella.

En el trabajo Alex monitoreaba cada detalle de la obra, ensayaba con los niños primeros, con ellos era lo que se enfoca va más para mejorar su tecnica, tambien monitoreaba a los músicos y los profesores para ver cómo era su desempeño con la pieza.

Yba de un lado a otro por todo el edificio, en varias ocasiones sus padres aún se encontraban en ensayos, en el camino Christian la regañada todo el camino al hospital. Su salud cada vez mejoraba un poco más, lo que mantiene a todos aliviados, también ayudaba a su madre con la fiesta de cumpleaños de Phoebe.

No había podido sentarse y hablar con ella, a veces la veía muy contenta y sonriente y otras algo triste y pensativa.

Habia hablado con Bastian para su regalo de cumpleaño que le habia prometido, lo que le provocó una pequeña discusión, ya que Bastian se negaba a que Alex lo pagara, pero al final no tuvo de otra que ceder, por esa vez. Caleb le dijo que sus clases iban excelentes y que hasta le había enseñado un poco de evasión al volante.

Viernes.

Alex salió del gran armario del griego mientras terminaba de secar el exceso de agua de su cabello, sosteniendo una crema hidratante en la otra.

Una rutina que tenía después de un largo dia bailando y dirigiendo de aquí para allá, era consentir sus piernas, para no sentirlas tan cansadas al dia siguiente.

Se dejó caer en la cama y se acomodo para empezar, solo llevaba puesto un camisón de seda gris que apenas le cubría las nalgas, Bastian fue que se lo había comprado por que un dia se negó a quedarse a dormir porque no tenía ropa para hacerlo.

Cuando estaba por tomar la crema su puerta se abrió dando paso a Afi seguido por su griego que solo llevaba un pantalón negro de dormir, el se dejó caer a su lado besándola.

─creí que pasarías más tiempo trabajando─ susurro ella sobre sus labios.

─no tenía mucho trabajo─ dijo encogiéndose de hombros─ permite ayudarte─ dijo quitándole la crema de las manos y acomodandola entre las almohadas.

─me mimas demasiado─ le dijo recostandose mejor.

─me gusta mimarte─ dijo tomando un poco de crema en sus manos y tomar su pie izquierdo y masajeandolo.

La Otra Hija De Anastasia Y Christian GreyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora