La Otra Hija De Anastasia Y Christian Grey

¿Podria Ser Ella?

Junio.

Sábado.

Gracias al sedante que le colocaron, Alex pudo dormir toda la noche tranquila, se sentía mucho mejor y se veía mucho mejor. Sam le llevó ropa para cambiarse, luego de un baño se la colocó, a las ocho recorría los pasillos del hospital, ya le habían dado el alto.

─Ella─ una mujer de bata blanca, quizás unos setenta o menos, la miraba muy sorprendida, incluso pasmada.

─disculpe, me esta confundiendo con otra persona─ contestó Alex, era la primera vez que algo haci le pasaba.

─eres tan parecida─ susurro.

─Alex ya nos podemos ir─ Sam llegó a su lado─ vamos debes desayunar y tomar tus medicamentos─le dijo mientras la jalaba del brazo, Sam no noto a la impactada doctora que hablaba con su hermana. Alex no puso mucha resistencia y se fueron.

Eso fue raro─ pensó Alex mientras atravesaba las puertas del hospital. Antes de subir al auto sintió una mirada en su espalda que le erizo la piel.

Grace aun no salía de su asombro, era idéntica a la madre de Christina, también se parecía mucho a su hijo y nieto, quién era esa joven?. Podría ser ella?, después de tanto tiempo, en dos meses se cumplirán 22 años, debía hablar con su esposo, no le dirían nada a su hijo y nuera aún, aunque lo disimulaba sabían que el recuerdo de esa pequeña estaba intacto.

Ya en el departamento de las chicas, Sam había dejado todo listo para que desayunaran a su regreso, después de la bienvenida de AFI se dispusieron ha hacerlo y luego discutir con Alex para que no limpiara lo ensuciado, el doctor le indico que no hiciera nada que descansara, que holgazaneara por una vez en su vida y Sam se encargaría de que lo hiciera.

Alex se sentó en su gran y favorito sofá junto con AFI, minutos después se durmió sin darse cuenta, lo que no descanso en la semana le estaba pasando factura.

Sam al encontrarla dormida después de terminar de limpiar todo, la dejo descansar y volvió a la cocina a hornear, si no fuera porque le encantaba ayudar a esos niños y madres a salir de esas vidas de violencia y maltrato, hubiera sido reportera le encantaba hornear, todos los fines de semana preparaba postres, desde galletas, tartas, pai, el favorito de Alex era el pai de manzana con helado de vainilla, crema batida, nutella y caramelo, eso era lo que eso era lo que más amaba en el mundo.

A las diez de la mañana mientras terminaba la mezcla para sus galletas con chispas, el teléfono del piso sonó, lo tomó enseguida para que el ruido no despertara a Alex, procuraba que durmiera el mayor tiempo posible.

─diga─ contestó, sosteniendo el teléfono con el hombro sin dejar de remover la base.

─buen dia señorita, le hablamos de recepcion, aqui hay una joven que la quiere ver y a su hermana─ informo.

─como se llama la joven?─ preguntó, no esperaba visitas.

─Phoebe, señorita─ contestó.

─deje que suba, ella es bienvenida cada vez que lo deseé─ le contestó.

No le había avisado a Phoebe el estado de Alex y con lo preocupada que estaba no le sorprendía que estuviera ahí.

Si hubiera sido por decisión de Phoebe, habían llegado horas antes, quería ver a Alex y comprobar ella misma que estaba bien, además sus papás la conocierán, quizás les debió advertir les un poco, pero ya les había mencionado el gran parecido que tenía con su hermano.

Sam la estaba esperando en las puertas del ascensor, solo vestía un overol corto de mezclilla, una camiseta sencilla, el cabello recogido de manera desordenada y descalza, así era como solía vestir estando en el departamento al igual que Alex. Por lo que no esperó encontrarse con los padres de Phoebe también.