Capítulo 26

318 23 0
                                    

EMILIO

Termino la última llamada para dejar todo listo para esta tarde, así que con más tranquilidad me dirijo hacia mi habitación para descansar un poco antes de dejar a Freya a su casa para que se cambie de ropa para nuestra cita.

Entro a la habitación y lo primero que veo es a Freya recostada en mi cama mientras se lleva una bolsa de papas a la boca.

Es increíble que vea la vea hermosa en cada estado en el que se encuentre, sin duda ha hechizado mi corazón.

Aún no me ha visto, ya que su vista recae sobre la enorme pantalla de en frente donde se está reproduciendo Destino de la Saga Winx en Netflix.

Me sorprende la cantidad de series que he aprendido gracias a Freya y sus gustos.

Sin decir nada, me acerco a la cama recostándome a su lado y robándole una papa de la boca.

-¿Está rico?-me pregunta haciendo que yo asienta con la cabeza mientras mastico tranquilamente

-En tres horas, nos vamos.-le recuerdo colocando mi cabeza en su hombro

-Esta bien ¿Ya me puedes decir a dónde iremos?-vuelve a preguntar

-No. Es sorpresa.

-No me gustan las sorpresas, no sabes con lo que te puedes topar.

-Lo entiendo, pero creo que todo te puede llegar a gustar si estás a gusto con la persona de al lado.

Ella me sonríe

-Tienes razón. Entonces sé que me gustará.

Mi corazón brinca de felicidad y no puedo evitar la sonrisa que se me asoma en el rostro al reaccionar ante sus tiernas palabras.

-¿Te sonrojaste cierto?-pregunta con una sonrisita burlona

-No sé de qué hablas.-contesto conteniendo la felicidad

-Estás sonrojado príncipe, te ves adorable.-me fastidia empujándome por el hombro

-No soy adorable.-frunzo el ceño

-Si lo eres.

-Que no.-gruño

-Que sí.

-Si sigues así la única que se verá adorable con las mejillas sonrojadas serás tú cuando te tenga debajo mío de nuevo.

Se sonroja

Me río

-Cállate y déjame ver mi serie.-sisea molesta evitando mi mirada

-¿Quieres que lo hagamos realidad...?-pregunto besando suavemente su hombro desnudo

Ella se estremece

-No.

-¿Segura?-vuelvo a besarla subiendo un poco más

-Segura.

-Mmm. Yo creo que no estás tan segura...

Mis manos empiezan a bajar hasta la liga de su pantalón mientras mis labios empiezan a recorrerle la clavícula.

Ella mira mis movimientos, pero rápidamente vuelve su mirada hacia la pantalla

-Quizás podamos terminar lo que no pudimos ayer...-digo besando por fin su cuello mientras desabrocho con agilidad su pantalón

Ella aprieta los labios, pero sigue sin mirarme

-No gracias.-responde con la voz ligeramente ronca

-A mi me parece que si quieres.

Somos Nuestro Lugar SeguroWhere stories live. Discover now