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MI ÁNGEL . . . 🧵!
fanfic —— twilight
written by 𝗶𝘃𝗮𝗿𝘆𝘀𝘄𝗽𝗱

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CELESTE SALIÓ DEL CASTILLO EN LÁGRIMAS, POR QUE tuvo que ser emparejada con un vampiro. Nunca sería capaz de aceptarlo por quién o qué era. Mató a personas inocentes por diversión, y eso iba en contra de toda su moral, todo lo que le habían enseñado desde la infancia.

¿Por qué el destino tuvo que ser tan cruel?

—¡Destino! ¡Eso es!—Celeste murmuró para sí misma, atrayendo algunas miradas extrañas cuando la gente a su alrededor vio a una chica corriendo con lágrimas por su rostro, todo mientras hablaba consigo misma.

Pero a Celeste no le importó, no cuando finalmente tuvo una solución a este problema.

Rápidamente, se dirigió al lugar donde había aterrizado por primera vez en la Tierra. Cerrando los ojos, murmuró un encantamiento que había grabado en su mente; su única salida de Volterra.

—Redi ad initium.

Antes de darse cuenta, Celeste estaba siendo absorbida sin problemas por el aire y hacia los cielos de arriba. Era una sensación extraña; podía sentir los vientos turbulentos a su alrededor como si fueran los que cargaban su peso

Todo el tiempo, Celeste sintió una fuerte necesidad de abrir los ojos, de ver el hermoso país de Volterra por última vez, pero no lo hizo. No era una gran fanática de las alturas, por lo que no había garantía de cómo reaccionaría su cuerpo al verla dispararse hacia el cielo.

Apenas había pasado un minuto, cuando Celeste cayó justo frente al castillo de destino con un ruido sordo. Levantándose, cepilló su vestido, mirando el lugar donde todo comenzó. La vista era tan hermosa, si no más, que Celeste recordaba; pero las situaciones que había suscitado el castillo, no eran nada hermosas, sino maliciosas.

Agarrando su vestido en sus manos, lo levantó suavemente para asegurarse de que descansara sobre sus pies, y estalló en un movimiento rápido en dirección al castillo.

Pasó por las mismas hermosas estructuras y pinturas, pero esta vez no les prestó atención, sino que estaba decidida. Decidida a acabar con esto, de una vez por todas. Perdida en tales pensamientos, Celeste no se dio cuenta cuando apareció frente a las puertas del salón del trono.

Empujando las puertas a un lado con la gran manija de hierro, Celeste irrumpió dentro de la habitación. Sin molestarse con ninguna de las bromas, espetó.—Fallé en la misión. No pude cazar a los asesinos. No me importa si no obtendré mis alas, o incluso si me castigarás por irme de la misión antes de tiempo, pero ya no puedo más. Me niego a hacerlo. ¡Me niego a volver a ese miserable lugar!

Una risa ligera sacó a Celeste de su divagación y se encontró con los ojos sinceros y cariñosos de Destino.—Querida, no había ninguna misión.

¿Celeste no podía entender lo que estaba pasando? El destino la envió a una misión y ahora el destino afirmaba que no había ninguna misión en primer lugar.—Pero... pero había gente... gente que estaba matando a otros, impidiéndoles el destino que habías escrito para ellos.

—Escúchame Celeste. Todo el mundo dice que el destino funciona de manera misteriosa, y esta fue solo mi forma de permitirte conocer a tu pareja.

Celeste se quedó atónita con este anuncio.—¿Sabías sobre esto? Sabías que estoy destinado a estar con un vampiro, ¿y estabas de acuerdo con eso?

Otra risa gutural salió de la garganta de Destino.—Creo que estás olvidando que yo soy el destino. Por supuesto que lo sabía, considerando que fui yo quien escribió este destino para ti.

—¡¿Qué?! ¿Por qué... por qué yo?

—Celeste, independientemente de lo que puedas pensar, eres perfecta para él, y él para ti. Así es como funciona. El mundo necesita equilibrio, siempre hay buenos y malos, yin y yang. Eso es lo que eres para él. Tu pureza e inocencia es exactamente lo que necesita un vampiro como Caius

Echando un vistazo al silencio de Celeste, Destino continuó.—Así es como debe funcionar, no intentes luchar contra eso, Celeste. No sabes de lo que te estás privando, encontrar a tu pareja es lo mejor, eso podría pasarte a ti, no dejes que tu ego se interponga en eso. Solo recuerda que el destino nunca comete errores.

—Si acepto este vínculo, ¿qué cambia? ¿Todavía tendré mis alas? ¿Tendré que vivir en la Tierra para siempre ahora?

—Has sido un ángel excelente Celeste. La valentía y el coraje que demostraste al enfrentarte a los vampiros fue encomiable. Y por lo tanto, yo, Destino, te otorgo oficialmente tu primer par de alas.

Esas palabras llenaron de calidez a Celeste, se llenó de alegría al ver a Destino hacer un gesto a los dos hombres que estaban de pie junto a su trono. El ángel a su derecha caminó hacia la mujer sentada majestuosamente en el trono con un plato cubierto de tela, y lo sostuvo frente a ella al alcance de la mano.

Rompiendo el contacto visual con Celeste, Destino extendió la mano para develar el plato, y lo que había debajo de la tela hizo que Celeste jadeara de alegría. Era un collar.

Pero no solo un collar común, era uno que Celeste había visto ostentar a innumerables ángeles, uno que representaba tu estado y tus alas. Incluso desde lejos, Celeste pudo ver que estaba pulido y cortado a la perfección. El brillante topacio grabado en el centro del collar resplandecía como el océano bañado por el sol lamiendo la arena.

Celeste se quedó allí, paralizada por la joya encantadora que tenía un aura magnífica y cálida que la rodeaba, emitiendo su brillo etéreo. Brillaba tanto, que si no hubiera habido luz en la habitación, su resplandor habría sido suficiente para iluminar todos los rincones del lugar.

Destino recogió el collar con delicadeza y se acercó a Celeste con la mano extendida. Dándole una sonrisa cariñosa a ella, Destino colocó el adorno en el cuello de Celeste justo sobre su pecho.

No hay palabras para describir lo que sucedió a continuación. Celeste estaba cubierta por un brillo cegador y emergió de él con alas blancas completamente extendidas. Realmente fue una vista mágica.

Mareada y abrumada por las emociones, Celeste saltó ligeramente sobre sus pies.—¡Gracias! ¡Muchas gracias! Realmente ni siquiera sé cómo agradecerte por esto.

—No hay necesidad de agradecerme Celeste, fue bien merecido. Ahora, solo recuerda que puedes separar tus alas cuando no tengas el collar activado, lo cual supongo que harás antes de regresar a la Tierra.—Destino le dio a Celeste un guiño burlón. y le hizo señas para que se alejara.—Ahora vete, ve a vivir tu vida.

Cuando Destino le dio la espalda a Celeste, caminando hacia su trono, no pudo evitar reflejar la enorme sonrisa que adornaba el rostro de la joven. Por fin todo iba por buen camino, y Destino no pudo evitar contentarse con lo que se avecinaba para la pequeña angel.

𝐌𝐈 𝐀𝐍𝐆𝐄𝐋 𝒇𝒕. caius volturi ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora