CUARENTA Y OCHO HORAS - RAFE CAMERON

2.7K 79 7
                                    

Sarah princess kook

Esme, soy Sarah, ¿qué tal todo? Hace mucho que no hablamos.

Espero que este siga siendo tu número de teléfono, sino, no sé a quién demonios le estoy escribiendo.

Sé que estarás mirando con cara de oler a mierda este mensaje, jajajaj. Dios, es como si pudiera verte en persona.

¿Qué tal tu vida?, ¿aun me recuerdas verdad? Tengo muchas ganas de verte y ponerme al día contigo, estos últimos años han sido muy raros.

Vamos a organizarle una pequeña fiesta a mi hermano, así rollo despedida de soltero. Aunque él ya tuvo la suya con sus nuevos amigos. No sé si lo sabes, pero va a casarse con Tania. La verdad es que no parece muy contento, o si, nunca sé cuando mi hermano es feliz. Nunca hemos tenido ese tipo de relación.

Pensé en volver a reunirnos todos... tú, Kelce, Topper y yo. Los cinco, como siempre. Como cuando éramos jóvenes. Te he enviado un billete de avión y el número del coche que va a recogerte para que vengas directamente al hotel. Tu madre es muy simpática, bueno, siempre lo ha sido conmigo. Aunque no sé si sigue pensando lo mismo después de lo que pasó. Espero que no me haya dado una dirección falsa.

No estás obligada a venir, pero pensé que sería divertido y bonito recordar viejos tiempos. Me haría mucha ilusión que vinieras.

Y a él también.

Respóndeme si vienes. Te quiero, Esme.

Alterno la mirada entre los mensajes y el billete de avión que reposan sobre la mesa. He leído los mensajes de mi mejor amiga unas cuarenta veces en las últimas horas. Tengo la cabeza saturada de recuerdos y el corazón latiéndome deprisa por culpa de los malditos nervios que me ha provocado recibir esto.

Sé que Sarah lo hace con la mejor intención. Aunque ella y su hermano nunca tuvieron una relación idílica, sé que se preocupan por el otro a su manera. Sobre todo Rafe. Rafe tiene una manera muy extraña de preocuparse con su hermana. Nunca hice comentarios al respecto y tampoco los voy hacer ahora.

Rafe. Solo pensar en su nombre me revuelve el estómago. ¿Qué se supone que tengo que hacer yo ahora con esta propuesta? Después de todo lo que pasó, ¿cómo se le ha ocurrido esta idea tan estúpida a Sarah? Quise poner distancia por el motivo que me pone en el mensaje, ¿qué pinto yo allí después de años sin vernos y sin hablarnos? ¿qué pinto yo allí si no soporto la idea de que el amor de mi vida vaya a casarse con otra persona que no sea yo?

Me haría mucha ilusión que vinieras.

Y a él también.

Desde luego que sí, Sarah. Desde luego que le haría muchísima ilusión verme. Bloqueo el teléfono y me dejo caer sobre el respaldo de la silla. Cierro los ojos e intento aclarar mis pensamientos. El sonido de unas llaves hace que me gire hacia la puerta. Es mi mejor amiga, Kiara. Esta me dedica una sonrisa, pero desaparece al instante y cambia su expresión a una de preocupación. Suelta de cualquier manera su bolsa de trabajo en el suelo y se acerca a mí. Supongo que mi cara es un horror.

—¿Qué ha pasado? ¿qué has roto? —Kiara echa un vistazo al piso antes de centrar la mirada en mí. Eso me hace reír.

—No he roto nada. De momento.

—¿Entonces, a qué viene esa cara de horror? —Kiara mira mi cara con atención, yo solo le indico con la mirada el sobre que hay junto a mi móvil. Ella frunce el ceño y lo coge entre sus manos—. ¿Qué es esto?

—Ábrelo —mi mejor amiga acata mi orden y cuando tiene el billete de avión en sus manos vuelve a fijarse en mí.

—¿Un billete de avión para pasado mañana? ¿Por qué? —alargo la mano hasta mi teléfono y se lo desbloqueo para que vea el mensaje. Kiara coge mi móvil y lo lee. Durante unos segundos, el único sonido que se escucha es el de mi corazón latiendo con fuerza contra mi pecho.

ONESHOTS - OUTER BANKSWhere stories live. Discover now