● My problem ●

Capitulo 7

-- es ella. Yuzuko Oko-

Un golpe de Mei lo interrumpio. Rodó los y se corrigió.

-- Yuzuko Aihara.

Los ojos de la teñida se abrieron como platos. Yuzuko... Yuzu...

-- ...yo.. no lo sé. Satoshi.

-- porfavor matsuri. Esto realmente es una emergencia. La culpable del secuestro.. es emily Carson

-- haa. Me deberás unos tragos junto a hermosas chicas después de esto. ¡Nene! Cúbreme!

-- ohh~ matsuri! Ya es la cuarta vez esta semana.

Hablo la otra chica que atendía la barra.

-- será la última está semana. Lo prometo.

La chica con un peinado de dos colitas suspiro. Termino aceptando, matsuri tomo su chaqueta y salió del bar.

-- primero que nada. Denme toda la información de esa chica.

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Era ella... Era su one chan..

Yuzu-chan...

-- ¿Demonio? ¿Está todo bien?

Pregunto el chico mientras veía confuso a la chica teñida. Está se acomodo el cabello mientras silbaba algo incómoda.

-- si. Solo recordé algo.. creo que se quién podría darnos una pequeña pista.

Mei estaba atenta.

-- esa tal emily frecuentaba el bar. A veces iba por presas fáciles de una sola noche. O sus hombres se divertían.

-- tu jefe.. es udagawa?

-- si. Exacto. Nos comentó que lo mejor es no acercarse tanto a esas personas. Incluso implementó seguridad para los clientes y nosotros.

-- bien, pero ¿a dónde nos lleva todo esto?

Matsuri se tomó un tiempo. Pensaba en lo mejor. Pero no tenía ninguna duda. Ella podría llevarlos.

-- oye, Aihara. Conduce a esta dirección.

Mei observó confusa el celular de la chica teñida, iba a protestar pero se lo pensó mejor, no hay tiempo que perder todo por su mujer.
Condujo un par de minutos hasta que la chica le apunto a un complejo de apartamentos, rápidamente bajaron caminaron hasta llegar a un apartamento, el 421.

-- ...¿Puedo preguntar cómo conoces está dirección?

Pregunta Mei desconfiada pues estaban en el apartamento de la ex novia de yuzuko, Rin Nakano.

-- tengo mis trucos.

Contesto con simpleza la teñida, Satoshi soltó su tipica risita burlona que solo hizo sentir insegura a la pelinegra, la puerta se abrió mostrando a una chica de cabello castaño oscuro, ojos negros, su piel se veía pálida y tenía unas ojeras notables.

-- ¿Que necesitan? No estoy interesada en comprarles lo que sea que tengan.

Contesto arrastrando las palabras. Matsuri solo la hizo a un lado y entro en el apartamento, había bastantes latas de cerveza y comida con moscas en una mesa, la dueña entro furiosa.